The Fiend & Bliss: Una llama que realmente no brilla

Desde hace un par de meses, los personajes que vienen dando que hablar en diversos comentarios en redes sociales son Bray Wyatt y Alexa Bliss. El dúo ha sido calificado como uno de los más grandes atractivos de la marca Raw basándose en la peculiaridad de sus segmentos, que tienen una connotación terrorífica. No les miento, se ven interesantes a simple vista, pero si analizamos en seco: ¿Estamos hablando de un acierto interpretativo o un ridículo disfrazado entre tanta espectacularidad? Esta y muchas más preguntas serán resueltas en este artículo donde en compañía de un experto del mundo cinematográfico, se analizará el matiz de ambos personajes, la historia tejida entre ellos y lo que verdaderamente proyectan.

El camino hacia el terror

Por Walter “The Lone Wolf” Merino

Bray Wyatt había dejado su faceta de sectario y regresó a las pantallas de WWE bajo el personaje de un raro conductor infantil con un demonio detrás al que llamaba “The Fiend”. No se sabía exactamente de donde obtuvo este rol, pero seguía el patrón del que ya estaba acostumbrado: Promos sueltas y ataques sin mucho sustento que desencadenan una rivalidad. En el camino parecía que impresionaba a los seguidores debido a la estética y “novedad”, lo que le permitió a Wyatt obtener un reinado como campeón Universal.

No parecía tener claro cuáles eran sus intenciones, pero iba en su mayoría contra la gente de su pasado como Seth Rollins o Braun Strowman. Con este último iniciaría una rivalidad donde el demonio atacó al antiguo interés romántico no canónico del monstruo, Alexa Bliss.

Lo disparatado empieza cuando Alexa empieza a mostrar síntomas de estar enloquecida en forma de muecas exageradas y una personalidad algo más agresiva sin algún tipo de justificación. Hace un momento era el chivo expiatorio de la rivalidad y en el proceso fue lastimada por Wyatt, y ahora sin algún tipo de desarrollo ya empezaba a actuar como él (aunque su desempeño in-ring no presentaba mayores cambios).

El dúo de The Fiend y Alexa pasaría a Raw donde entrarían en el mismo círculo previamente mencionado hasta involucrarse en una rivalidad con Randy Orton, donde la pareja del terror daría rienda suelta a algunas de las ideas más volátiles vistas en segmentos, sobrexplotando el lado pirómano de Orton y una puesta en escena poco favorable para la generar una idea de horror (su principal foco en teoría). Más que adentrarse a este género se encargaron de volverlo una parodia debido al efectismo creado y personajes sin un fin claro.

Ausencia de un relato con causalidad y cohesión

Por Alex Rivers (Nuestro cineasta experto)

El problema principal del bookeo de The Fiend y Alexa Bliss es que solo presenciamos un efectismo vacío que no narra ninguna historia, los segmentos buscan el impacto sin sustento dramático o desarrollo de los personajes. Casi siempre jugando a lograr un cliffhanger que cada vez se siente menos efectivo. El motivo de este fallo de planteamiento es la falta de causalidad, no hay un planteamiento de reglas del juego sobrenatural que se respete y que sea consistente.

Por ejemplo, el Kane de la Attitude Era tenía mayor coherencia en su bookeo. Las llamas eran parte de la estética de su atuendo, de su entrada, de su titantron y de su famoso taunt. Luego nos enterábamos que era hermano de Undertaker, que también tiene poderes, que detrás de su máscara escondía quemaduras de su pasado y en algún segmento lo vimos usar pirokinesis. Había una construcción con hilo conductor.

En cambio, en este bookeo de The Fiend, Alexa manipula el fuego de una semana a otra, sin motivo, sin relación con su personaje. Solamente lo hace porque sirve para crear una imagen que impacte, que saque un gif que genere likes y shares en Twitter. Y ahí se queda todo, buscando el aplauso fácil. El equivalente en segmento a un spotfest sin sustancia o storytelling en un combate.

Fallos desde el inicio

La “reinvención” de Bray Wyatt data de cuando pierde con Matt Hardy en aquel símil del “Deletion”, donde el personaje de Wyatt es “borrado” y aparece paulatinamente el mundo de The Fiend. Un acierto de Wyatt fue pensar en una nueva estética, el fallo fue no darle un sentido narrativo.

Podemos afirmar que los segmentos de The Fiend son una mezcla entre la estética infantil/terrorífica de “Don´t Hug Me I´m Scared” y “Too Many Cooks” (especialmente los segmentos de Bill). Los colores saturados del set de Firefly Fun House son muy similares al set televisivo, incluso en cuanto a paleta de color se refiere.

Y si la estética del set y los títeres provienen de Don´t Hug Me I´m Scared, la dinámica del personaje perturbado dirigiéndose hacia la audiencia, con el tratamiento audiovisual de una sitcom donde oímos música, efectos y reacciones de la gente, tienen su origen Too Many Cooks de Adult Swim. ¿Cuál es entonces el aporte de Bray? ¿La máscara? Fue creada por el legendario Tom Savini y su equipo.

Una cosa es tomar una referencia para crear tu propia obra, pero solo mezclar dos estéticas ya vistas, aportando poco más: ¿Dónde deja la originalidad de Wyatt? Suena extraño para un tipo que muchos fans califican de “genio creativo”. Incluso lo del personaje de terror que se levanta ileso luego de un ataque lo habíamos visto como uno de los sellos de Undertaker, ¿Cuál es la novedad aquí? ¿Abusar del recurso varias veces por combate porque sí?

¿Reinvención o retroceso?

Si comparamos a Bray Wyatt con The Fiend, veremos varias diferencias. Aunque algunas pueden ser más aparentes que sustanciales. La dinámica de Bray solía ser: historia acechando al rival, promo críptica y combate donde podía haber o no algún efecto especial.

El problema es que la dinámica de The Fiend es totalmente plana: Segmento grabado en Firefly Fun House, segmento/promo con efectos especiales y combate con efectos especiales. The Fiend tiene el pie forzado en cada lucha de que debe mostrar que es resistente y que tiene poderes. Algo que como Bray Wyatt podía saltarse y tener un combate de wrestling de principio a fin. Ahora, ni eso.

Derribando creencias

Por Walter “The Lone Wolf” Merino

Uno de los puntos para defender este ángulo es su recepción en Youtube. ¿Es necesariamente un video con hartas reproducciones o me gustas un sinónimo de calidad? Un rotundo no.

Tomemos por ejemplo la historia de Lashley/Lana vs Rusev que a día de hoy tienen videos que oscilaban entre 8 y 13 millones de visitas en Youtube, lo mismo con el duelo de vencidas entre Braun Strowman y Bobby Lashley, que tienen 110 millones de visitas a la fecha. Ambas son rivalidades olvidables que a pesar de las visitas no pueden ser consideradas de calidad, ni considerar a alguno de los dos como draw. Mucha gente consume este tipo de registros por los títulos atractivos, contenido amarillista o porque deja situaciones para el meme. Es algo común de varios canales de la plataforma.

Otro punto para defender esta historia es la mención de ambos personajes en redes sociales. No necesariamente eso es un buen síntoma de calidad. El impresionar al fanático típico de la IWC se hace menos difícil en redes sociales. A día de hoy muchos se dejan llevar por el gif de la movida bonita, iniciando ridículas campañas de push para gente que no lo merece como Naomi o pedir campeonatos mundiales a luchadores sin bases de entertaining. Esta historia en su desesperación por llamar la atención del fan casual busca métodos más absurdos para lograrlo, sin importar si caen en lo ridículo o lo gastado.

Por ultimo están las comparaciones con la relación del Joker y Harley Quinn. Mencionarlo como un nuevo enfoque es que la construcción de los personajes sean distinto a los sujetos a comparar, pero la esencia o punto vital siempre este allí, en el caso del Joker y Harley su foco central era el amor tóxico, el punto de The Fiend y Alexa no ha sido explicado, no se saben las motivaciones de la rubia para darle un matiz al “personaje”, ni siquiera de las intenciones de Wyatt. Es un cascarón vacío, pero como se ve bonito, la gente cree que está bien.

¿Cuál sería el enfoque correcto?

El problema es que no se hicieron las cosas en orden. Lo primero debió ser convertir a Alexa en una face con personaje definido, lo único que la diferenciaba de otras faces era que tenía una amistad con Nikki Cross, un leve contraste. Pero Alexa carecía casi por completo de más características propias: Objetivos, personalidad, catchphrases o un vestuario distintivo que se retroalimentara con otros elementos como su tema de entrada, titantron, taunts, etc.

Una vez que tuvieses a Alexa construida individualmente como face, ya el espectador sentiría una pérdida, una pugna de voluntades que podría ser más importante que la dinámica de querer o no querer atacar a su ex compañera de tag team. Una de las claves principales del género del terror es sentir que hay algo vital en juego, y justamente aquí ese elemento está ausente.

Así cómo está planteado Alexa solo es una sidekick, una secuaz cuya única función es elevar al personaje de Wyatt en cuanto a estatus y poder dentro de la ficción. Todo lo que hace ella es una versión de lo que podría hacer el mismo Wyatt o cualquier face genérica poseída. Alexa realmente no está ganando nada salvo visitas o el aplauso fácil del fan que todo le celebra porque es ella.

Se que las comparaciones son odiosas pero un buen ejemplo de personaje sobrenatural es Su Yung en IMPACT Wrestling. Un personaje que proyecta mejor la estética de terror desde la entrada, los gestos y moves vistos en un ring te hace pensar que verdaderamente estas ante un personaje intimidante. Su Yung ha podido interpretar otros personajes en pantalla, algunos de carácter mas suave (Susie) y ahora mas reciente lejos de lo sobrenatural (Susan).

Lo mejor de esto es que el cambio de personaje se justifica bien, te dicen un porqué y cómo llegaste a este cambio, algunas veces tiende a caer en lo alucinante pero juega sobre el contexto correcto. Por ejemplo, cuando el personaje de la novia muerta “pierde la vida” en su rivalidad con Havok, marca aparición de Susie (su lado humano real), pero al mismo tiempo se guarda parte del gen maligno de Su Yung y solo cuando es llevada a un límite muy extremo lo libera.

Lo que me gusta de los segmentos y enfoque del personaje de Su, es que el panorama se siente más natural, sin movimientos bruscos de cámara, ambientación acorde con la naturaleza y representación del personaje, gestos o distintivos característicos que hacen este personaje como algo creíble o destacable dentro de un encordado. Ni hablemos del desempeño in ring, que está mejor estructurado y sin caer en el sobrebookeo pretencioso como es el pecado de las luchas de Wyatt y/o Alexa (cosa de ver sus combates con Deonna Purrazzo). Creo que a nivel interpretativo, Alexa puede tomar algunas notas respecto al personaje y cómo ser mas creíble no solo en escena, también en un ring.

Un rumbo poco alentador

El horizonte de esta rivalidad no parece ser el más esperanzador de todos y en los que vamos encontrando más disparates respecto a los personajes, vemos también podemos encontrar fallas relacionadas a la acción in-ring.

1. Sobrebookeo que sigue convirtiendo los combates en segmentos, haciendo que el concepto de luchas cinematográficos quede gastado o empiece a perder valor en el proceso. Ya estas alturas no sabemos si estamos viendo una empresa de wrestling o algo demasiado surrealista que podríamos encontrar en series animadas o de ciencia ficción.
2. Incoherencia en el bookeo de Alexa, que empieza a seguir las tendencias vacías de The Fiend al hacerse súper fuerte y resistente, pero dicho efecto decide no utilizarlo desde el inicio, sin motivo alguno. Si hubiese algo que lo respaldara tendría sentido, pero aquí queda como conveniencia sin sustancia que busca a impactar al espectador y hacer menos plano el combate.

El hacer personajes indestructibles en bookeo resulta un problema no solo para las luchadores, sino para la coherencia de lo combates. Pasó en el ultimo Raw, donde Asuka siendo un destacada luchadora en cuanto a ofensiva parecía casi ni hacerle cosquillas a Alexa, a quien le bastó una cachetada infernal junto a un sister Abigail tras previo no sell, para vencerla de la manera más poco creíble en términos de ofensiva y de bookeo.

Es así como se ridiculizó la ofensiva de la campeona dejándola como cualquier cosa e instalando el miedo de obtener resultados similares o recurrir a spotfest baratos como los combates de Wyatt.

Conclusión

Hemos podido evidenciar en este artículo que esta historia carece de un sentido lógico desde un tiempo considerable. El enfoque mostrado va en una tónica ajena al terror, dejándose llevar por el destello de los efectos más que una coherencia argumental. Bray Wyatt más que una reinvención, parece atado al mismo plan utilizando efectos, mayor color y conveniencia argumental. Una demostración del dicho “no todo lo que brilla es oro”, cuya mayor defensa parece estar sujeta a cantidades de vistas que por sobre calidad de vista.

Yo plenamente creo que ambos personajes están en capacidad de crear una dinámica amena, pensando que Alexa y Wyatt tienen soltura en el lado del entretenimiento, por lo que pueden sostener una historia, pero no esta, una que va yendo con los matices equivocados y más que dejar una rivalidad o historia para el recuerdo, están evidenciando cuan obsoletos o desesperados están los creativos de WWE respecto a producir en ese apartado.

¿Piensa lo contrario? ¿Cree que nos olvidamos de tocar algún punto? ¿Nos deseará la muerte por esto? Siéntase libre de expresar sus ideas en la caja de comentarios.

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