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Caso Big E y Xavier Woods: No todos los campeones (y reyes) deben vestir terno
Reflexión sobre las críticas contra Big E y Xavier Woods por su lado cómico.
“Son unos payasos”, “desprestigian el título”, “no deberían ganar torneos como el KOTR”, son algunas frases que se han leído los últimos días por parte de la comunidad de fanáticos de WWE, especialmente, en Latinoamérica.
El campeón Big E y Woods KOTR
Big E logrando el Campeonato Mundial y Xavier Woods quedándose con el King of The Ring ha desatado una serie de críticas por el carácter “cómico” de los citados luchadores.
Para algunos, el campeón tiene que ser alguien serio, de ceño fruncido, que idealmente vista elegante, porque de lo contrario, le quita validez e importancia a la correa. Una especie de tirria a todo atisbo de comedia o que se diferencie de los cánones establecidos.
Sí, la comedia de Vince en líneas generales es bastante mala, con chistes de peos como con Natalya años atrás, Mae Young pariendo una mano o las bromas fomes de DX en 2006 y 2009. Pero eso no debería ser relevante a la hora de menospreciar un género que puede ser muy atractivo si lo sabes manejar.
Ese prejuicio contra la comedia no es nuevo, estaba patentado por décadas en Hollywood donde siempre el drama se imponía y los que buscaban hacer reír eran apuntados como payasos. Hoy eso se ha ido disipando cada vez más, con producciones que tocan esa tecla más “graciosa” que nada tiene que envidiarle a trabajos dramáticos. Y que resultan hasta mejores en varios casos. Toma cualquier serie y puedes encontrar muy buena inspiración usando el humor como arma.
En el wrestling, hay competidores que han logrado derribar esos muros. Orange Cassidy es un ejemplo de ello, un personaje muy singular que logra llegar a la grada. ¿Por qué no puede ser campeón mundial?, ¿por qué usa una camisa de mezclilla? Conecta, es inteligente, cumple en el ring y genera audiencia. Y sobre todo, es diferente. Dámelo.
Con New Day pasa algo similar, volviendo a esa premisa que el humor de Vince es añejo, Kofi, Big E y Woods lograron buscar un sello y al menos, entregar algo mucho más decente a otras épocas de la empresa. No son “The Office” o “Arrested Development”, pero sí tipos carismáticos y con un objetivo súper funcional para lo que la compañía necesita. Le sumas, además, que son buenos competidores.
Big E tiene todo para ser un campeón mundial importante: físico, carisma y buen trabajo en ring. ¿Cuál es la necesidad de convertirlo en un campeón genérico más saliendo todos los lunes con el traje más elegante diciendo palabras en tono serio en una promo sin sustento alguno? Lo mismo se puede decir ahora con Woods, el menos beneficiado de forma individual de New Day que recién tiene su primer gran logro. Un tipo divertido, que no le teme a la creatividad y que en ring es más que cumplidor.
Si la comedia la manejas bien, es una herramienta extraordinaria para darle algo más de frescura a tu producto. Los tiempos han cambiado, y si ya ha quedado atrás eso del “campeón mundial grande e imponente”, no veo problema en que tengamos a gente que hace y/o busca reír en la escena principal de cualquier compañía de wrestling.
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