Kenny Omega: ¿Sobrevalorado?

Por Funeral Fog.

En la WWE el hombre del momento tiene nombre y apellido: Roman Reigns. Dueño y señor de la mayor parte de las polémicas, fanáticos, detractores, críticas y alabanzas habidas y por haber. Sin embargo, fuera de los dominios de la empresa de entretenimiento deportivo por excelencia existe un hombre que está haciendo el suficiente ruido como para dedicarle un par de líneas: Kenny Omega.

Sí. El friki amante de la cultura japonesa de pelo ondulado que luchó contra una niña de 9 años pasó de ser eso, al luchador más polémico fuera de la compañía de Vince McMahon.

¿Quién es Kenny Omega?

No somos Wikipedia, por lo que este artículo no pretende aburrir con una biografía o repaso detallado de la carrera de este oriundo de Winnipeg, Manitoba, Canadá. Pero si se pueden marcas hitos importantes para poner en contexto; como su discreto paso por ROH, algunas participaciones de culto en PWG – véase Kenny Omega vs Bryan Danielson año 2009- y su fallido run en el territorio de desarrollo de WWE que en ese entonces era DSW (2005-2006). No obstante, el verdadero éxito de Kenny se forjó en “La tierra del sol naciente”, Japón.

Al poco tiempo de debutar se fue transformando en uno de los pilares jóvenes de la ascendente empresa Dramatic Dream Team (DDT) junto a luchadores como Kota Ibushi (ambos formaron el equipo llamado Golden Lovers). Omega con un estilo claramente inclinado hacia la comedia repartía sus apariciones entre múltiples empresas japonesas, la citada DDT y la división peso Junior de NJPW (llegando a conseguir el título IWGP Junior por parejas), Kenny se fue haciendo un nombre cada vez más grande, representaba al gaijin perfecto –gaijin es la palabra con la que se denomina a los extranjeros en Japón-, debido a que no era el wrestler foráneo habitual; amaba la cultura del país, hablaba su lengua y el estilo “luchístico” que poseía era casi por completo japonés. Kenny Omega pasó a ser uno más de ellos.

Así, la oportunidad de su vida llegó cuando el gigante nipón New Japan Pro Wrestling decidió contratarle a tiempo completo en octubre del año 2014.

Ya como integrante del Bullet Club estuvo poco más de un año como uno de los pilares de la división Junior (consiguiendo dos veces el campeonato máximo de la división), hasta que llegó el momento donde su carrera despegaría por completo.

Luego de perder el campeonato IWGP Junior Heavyweight ante KUSHIDA en Wrestle Kingdom 10, pineo limpiamente en un combate tag al campeón IWGP Intercontinental de ese entonces y uno de los estandartes de la empresa Shinsuke Nakamura; al mismo tiempo traicionó y desterró del Bullet Club a AJ Styles haciéndose con el liderato del grupo y pasando oficialmente a la división heavyweight; todo esto ocurrió el día 5 de enero en el tradicional evento Post-Wrestle Kingdom llamado New Year Dash, presentado en el mítico Korakuen Hall.

Posterior a eso solo vendrían hechos que acrecentarían su meteórico ascenso:

  • Se proclamó campeón IWGP Intercontinental venciendo al recién relevado ace Hiroshi Tanahashi en el evento The New Beginning in Niigata.
  • Ganó el prestigioso G1 Climax en su primera participación, convirtiéndose así en el primer no-japonés en quedarse con el torneo más importante del wrestling profesional, logro que ni siquiera leyendas del calibre de Ric Flair, Vader, Stan Hansen, Andre The Giant  o Hulk Hogan consiguieron, aun participando en más de una edición.
  • Retó al campeón IWGP peso pesado Kazuchika Okada en el evento más importante de la empresa Wrestle Kingdom 11, presentado en el Tokyo Dome. Kenny se llevó la derrota pero el combate cambiaría su vida, gran parte de la crítica y fanaticada elogió el match dejándolo casi instantáneamente como una performance de culto.
  • Volvió a retar sin éxito al campeón máximo de la empresa Kazuchika Okada en el segundo show en importancia de NJPW, Dominion 6.11. El combate de una hora de duración y terminado en empate, incluso superó en repercusión al anterior, debido a las valoraciones de cierta parte de la crítica especializada.
  • En el fin de semana del G1 Special in USA se convirtió en el campeón inaugural del título IWGP Peso Pesado de los Estados Unidos, correa que pretende ser pieza clave en la expansión de NJPW por tierras norteamericanas.
  • Omega alcanzó nuevamente la final del G1 Climax en su segunda participación, cayendo esta vez en el encuentro decisivo ante Tetsuya Naito.
  • La leyenda de WWE y el pro-wrestling mundial Chris Jericho desafió a Kenny Omega a un combate en el evento Wrestle Kingom 12. La lucha tendrá lugar el próximo 4 de enero del 2018 en el Tokyo Dome y se pactó como encuentro titular, por el campeonato IWGP Peso Pesado de los Estados Unidos.

¿Es Kenny Omega un wrestler sobrevalorado?

Centrándose en el apartado in ring, si sacamos a Omega sus exageradas expresiones faciales muy típicas del wrestling profesional americano y un par de movimientos de su repertorio nos queda un luchador japonés casi en lo absoluto, hablando netamente de ofensiva, la cual mejoró de manera abismal luego de su subida a heavyweight. El repertorio de Omega está principalmente basado en peligrosos Dragon, Tiger y German suplexs, golpe stiff característico (rodillazo V-Trigger nacido de una parodia al “Boma Ye” de Shinsuke Nakamura). Las movidas mencionadas anteriormente son muy comunes de ver en un wrestler japonés promedio, nada fuera de lo común en el puroresu; pero para alguien no interiorizado puede resultar extraño ver a un canadiense luchar de esa manera. Aun así, su trabajo en cuanto a ofensiva resulta coherente si es analizado, ya que durante los combates se centra en dañar mayormente el cuello y cabeza, zonas castigadas en su efectivo y protegido finisher “Katayoku no Tenshi” u “One-Winged Angel” para el que lo prefiera en inglés.

Omega tampoco tiene problema en prestarse para a los eternos intercambios de duros chops y golpes de antebrazo tan típicos del wrestling japonés.

Si pudiéramos hacer una comparación con otro wrestler, el indicado sería Kento Miyahara (actual ace de AJPW) con un estilo en el ring muy parecido, pero que por nombre y atención mediática no suena mayormente al estar en una empresa que hoy en día no goza de demasiada repercusión. Por lo mismo sus críticas son mayormente positivas y no cuenta con los detractores de Omega.

La psicología y storytelling en el ring de Kenny es efectiva, ya que en sus performances más aclamadas logró la virtud de imprimirle un enorme dramatismo a sus combates, lo cual encantó a la crítica. Puede gustar más o menos la forma en que lo hace, pero cumple con el objetivo de dar algún tipo de sentido al match.

El selling es uno de los apartados en el que más se le tienen reparos. Su bumping no debería tener objeciones, es una de las grandes virtudes del canadiense. El problema está al momento de vender el cansancio o alguna extremidad.

Lo de las extremidades es materia de análisis profundo, porque si bien, no suele cambiar su rutina, en post de un selling más realista, generalmente se preocupa de mostrar ciertos gestos de dolor a la zona dañada (véase su combate con Juice Robinson en Destruction in Kobe 2017 o ante Minoru Suzuki en G1 Climax 27 el cual fue muy criticado pese a que mostró dolor a su rodilla hasta el final).

La “constante” de no vender cansancio de manera perfecta al final de los combates tiene una explicación, King’s Road

NJPW estos últimos años fue dejando poco a poco su sello característico, el Strong Style; estilo implementando por el fundador de la empresa Antonio Inoki, el cual estaba estrechamente relacionado con las MMA, con una forma de combates muy particular, generalmente cortos con finales impredecibles, y en el que primaba un llaveo muy realista acompañado de fuertes golpes y patadas propias de las artes marciales orientales.

Hoy con la esencia de la empresa casi extinto, se adoptó el exitoso estilo de la empresa rival AJPW en los años noventa, el King’s Road; con un planteamiento más “formulaico” y algo predecible, consiste en un inicio pausado, nudo y desenlace frenético lleno de dramatismo y épica. ¿Este tipo de combate recuerda a alguien? Sí, Kenny Omega es el intérprete perfecto para esto; no el mejor, porque Hiroshi Tanahashi y Kazuchika Okada son los amos y señores de hoy en día en el “género” (ni se diga Misawa, Kobashi o Kawada en sus tiempos) pero Omega tiene el talento innato para el estilo King’s Road y es donde mejor se acomoda. Los finales dramáticos y épicos tan característicos de Kenny Omega no son más que una política general de la empresa para sus Main Events, pero con el canadiense alcanzan la máxima potencia por su particular forma de interpretarlo y por ser occidental. A algunos les hará pararse de su asiento por la emoción que se intenta transmitir, así como a otros les parecerá ridículo.

Si hablamos fuera de los parámetros que conciernen al nivel en el ring, tenemos a un tipo carismático que no le teme al ridículo y la comedia, capaz de embolsarse tanto a fans como detractores, muy apegado a la estética del villano de videojuegos y con la capacidad de hacer buenas promos tanto en inglés como japonés. Para no ser un luchador de WWE, tiene un micrófono superior a la media.

Kenny Omega es un gran luchador de puroresu o de King’s Road, reduciendo aún más la ecuación. Si lo sacamos de las fronteras de Japón y es evaluado bajo un parámetro neutral puede fascinar o producir rechazo a la primera impresión, dependiendo del criterio. En cuanto a logros, NJPW lo ha construido a fuego lento y cuando llegó el momento estuvo a la altura de su empuje, llegando al punto de convertirse en uno de los extranjeros más importantes en la historia de la empresa sin siquiera aún haber ganado el título máximo.

¿Sobrevalorado o no? usted como aficionado tiene la última palabra.

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Publicado por

Dos dos solo dos

Cuando no estamos en temporada de circo, aprovechamos de escribir y hablar de lucha libre. Para muchos, es como si siguiéramos en las carpas, para otros, también. Lo concreto es que acá les tenemos una amplia variedad de temas sobre las luchitas.

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