Kevin Owens, con más de 20 años de experiencia en el mundo de la lucha libre, ha pasado nueve de ellos en la WWE y ha compartido su perspectiva sobre una fase menos destacada de su carrera en la empresa.
“El año 2018 fue un punto muy bajo para mí en la WWE porque recuerdo que no estaba involucrado en cosas que consideraba tan importantes como podrían haber sido“, fue lo que dijo Owens a TNT Sports. “Sentía que no me estaban presentando de la manera que deberían. Lo cual es algo por lo que todos en algún momento de su carrera atraviesan y sienten”.
Las rivalidades que lo hicieron bajar de jerarquía
Owens explicó que, a pesar de haber tenido dos años anteriores de éxito, siempre estaba enfocado en lo que vendría después en lugar de vivir el momento presente. Recordó que comenzó a sentir que estaba descendiendo en la jerarquía de luchadores cuando se involucró en rivalidades con Bobby Lashley y Braun Strowman.
“No tengo nada en contra de esos tipos, pero en esencia, era como un maniquí de pruebas de choque. Hice un buen trabajo porque entregué todo lo que tenía. Pero también tuvo un impacto significativo en mi cuerpo, y hacia finales de 2018, llegué a pensar: ‘Creo que necesito un tiempo [fuera]’ porque ya no estaba disfrutando nada de esto“.
Kevin Owens recordó conversaciones que mantuvo con Shawn Michaels y Vince McMahon, en las que le aconsejaron concentrarse en vivir el momento presente. Tras descubrir que necesitaba someterse a cirugía en ambas rodillas, decidió tomar algunos meses de descanso. Y así para recuperarse de sus lesiones, transformando su mentalidad después de asimilar los consejos de Michaels y McMahon.
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