Vuelve la pesadilla: Goldberg regresa a WWE y va por Drew Mcintyre

Acá el “no lo vimos venir” no cuaja, porque si no era Drew era Roman Reigns. Al final, es el mismo círculo de mierda que se repite hace cuatro años con Goldberg.

Durante la celebración de un Raw cargado con leyendas que aparecieron como 30 segundos con suerte en backstage, Goldberg apareció sobre el final una vez que el escocés retuvo el título ante Keith Lee. En palabras simples, le hizo un reto para el Royal Rumble.

¿Goldberg seguirá sin posicionar a nadie?

El principal problema del ex campeón de WCW pasa que no ha contribuido en nada con los talentos de la empresa, porque más allá de la exposición que significa -para algunos- enfrentarse a él, en luchas tipo squash es poco el valor que puedes sacar. Y combates que termina ganando, más encima.

Primero fue Kevin Owens, quien perdió el título Universal en segundos. Luego vino The Fiend en Arabia, un luchador que se veía imbatible pero que a las primeras cayó ante un tipo de 54 años. Ni hablar de Ziggler que se comió una derrota humillante (aunque bueno, una más al historial).

No hay excusa que valga ya. Ni que el rating, ni que la nostalgia, ni que el impacto mediático, ni que el público (que no hay), ni que la astrología, ni el cambio climático. Ojalá que si se concreta el match, Drew gane rápidamente, cualquier otra opción sería vergonzosa. Una vez más.

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