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Sasha Banks necesita a AEW y AEW necesita a Sasha Banks
Análisis sobre el estado de Sasha Banks en WWE y porque una partida a AEW la haría ganar tanto a ella como a All Elite.
Publicado
2 años atrásen
Por
Ignacio SalvoUna visión del incierto futuro de Sasha Banks
La polémica de Sasha Banks y Naomi con WWE se ha tomado los titulares de los medios especializados en las últimas semanas. Esto ahora agarró un nuevo cariz: se rumorea que el contrato de ambas está próximo a expirar. Eso quiere decir que nos enfrentemos o no a un despido doble, es muy factible que una o las dos salgan de la empresa. Y si cualquiera de estos talentos se llegan a encontrar libres, habría chances de que fueran captadas por AEW.
La Four Horsewoman infravalorada
Desde las entrañas de NXT, The Four Horsewomen cambiaron para siempre el panorama femenino de WWE. Antes de ellas la empresa había tenido chicas carismáticas, con un buen micro o con notables habilidades interpretativas, pero siempre había habido carencias en el ring. En parte porque hubo contadas luchadoras realmente buenas a la hora de ejecutar combates y porque la misma empresa no confiaba en ellas para hacer grandes encuentros, por lo cual rara vez se les daba más de 10 minutos por combate.
The Four Horsewomen, Charlotte Flair, Becky Lynch, Bayley y Sasha Banks. Cuatro chicas que aparte de funcionar entreteniendo tuvieron talento in-ring y de paso la confianza suficiente de WWE para cambiar la forma en que funcionaba su pobre división femenina. Es cierto que desde entonces han aparecido otros nombres que cumplen en el ring y como entretenedoras, pero es innegable que el cambio comenzó con ellas cuatro.
Cuando tres de estas prospectas subieron al main roster el 2015, Sasha Banks era la más popular. No obstante, la empresa le apostaba todo a Charlotte y “The Boss” fue eternamente eclipsada por “The Queen”. Luego en el 2018, la siempre postergada Becky creció en popularidad a la vez que recibía un gran push y terminó convirtiéndose en una estrella aún más grande que Charlotte. Finalmente, Bayley que ya venía de tener un fallido run como top babyface comenzó el 2019 el reinado más largo de la historia del SmackDown Women’s Championship.
¿Y que hay de Sasha? Hasta el 2020 utilizada para poner over a cuanta luchadora se le ocurriera a la compañía. Aprovechaban su consagrada habilidad en el ring y su popularidad para que la rival de turno luciera. Pero raramente con grandes victorias. Es cierto que llegó a ganar cinco veces el RAW Women’s Championship, pero con ningún reinado que haya durado sobre el mes. Todo lo anterior sin mencionar que antes del 2021 nunca ganó en WrestleMania.
Las cosas parecían cambiar el 2020, cuando ocurrió la aparición de Sasha en “The Mandalorian”. Fue un rol secundario, pero con apariciones en tres capítulos de la serie y de hecho pudimos ver como le hizo hasta un DDT al mismísimo Boba Fett.
La mayoría de las carreras en la pantalla grande o chica que se ven en WWE se limitan a papeles menores en series de bajo impacto y WWE Studios, una fuente de producciones que en general solamente alcanzan al pequeño nicho de gente que sigue la empresa. Lo que hizo Sasha en “The Mandalorian” superó con creces todo eso. De un momento a otro, tuvo en las producciones ajenas a WWE un impacto que nunca ha tenido un Randy Orton por ejemplo.
Cuando un luchador de WWE tiene cualquier participación en la televisión ajena a la empresa, estas suelen ser muy promocionadas. Y llega a ser ridículo, como en contraste le dieron escaso alcance mediático a lo de Sasha. Se cree que es porque WWE no fue la que la puso ahí, más bien la gente de Disney son quienes la buscaron a ella. No deja de ser absurdo, ya que haya o no acuerdo con Disney, podían sacarle mucho jugo al alcance mediático que le pudo llegar de rebote a la cada vez menos mediática WWE.
Podría decirse que WWE capitalizó en alguna medida la participación de Sasha, tras coronarla ese mismo 2020 con el SmackDown Women’s Championship e incluso ponerla en uno de los combates principales de WrestleMania siguiente. No obstante, ese reinado de 4 meses concluiría con Sasha cayendo una vez más en el rol de poner over a otra luchadora, en este caso Bianca Belair. Y lo peor es que desde entonces nunca volvió a recuperar esa importancia fugaz.
La versión original es que la molestia de Sasha se debía a que una vez más, WWE no quiso darle importancia alguna a la división en equipos de mujeres. Ahora toma fuerza la teoría de que realmente es porque seguían empecinados en tratarla como a una estrella menor, situación que quedó muy clara cuando Sasha quedó bajo Ronda, Charlotte, Becky y Bianca el último WrestleMania. Ronda regresó y a quien sacrificaron fue específicamente a ella. Tal cual, parece que no importa que haga Sasha, nunca será vista como una luchadora top.
El problema con la división femenina de AEW
AEW tiene elementos muy valorables objetivamente, sobre todo cuando la comparamos con un coloso de bookeo decadente como lo es WWE. Pero no es una empresa perfecta y para cualquiera que quiera atacarla hay un blanco muy fácil: la división femenina. A ratos criticada porque las chicas no tienen pantalla y otras veces porque el producto que ellas muestran no tiene una recepción demasiado positiva.
En mi opinión, es un tema de falta de estrellas. Tienes a Britt Baker, una estrella pequeña siendo realista, y varias luchadoras a quienes aún les falta dar EL paso. Para Dynamite, por lógica le vas a dar preferencia a tus nombres grandes y esos están objetivamente en la división masculina. Las chicas se quedan con menos minutos y aún así se nota que a Tony Khan y compañía les cuesta plantar ángulos interesantes o que generen real interés.
En la división masculina tienes de manera constante a CM Punk, Bryan Danielson, Jon Moxley y Chris Jericho, y cualquier ser pensante sabe que todos esos nombres son mucho más grandes que una Britt Baker o cualquier otra chica de la empresa. ¿El factor común evidente? Que se hicieron un gran nombre en WWE antes de llegar a AEW, y no debería doler reconocerlo.
Seamos cuerdos con el ardor que provoca darle importancia a una estrella ex WWE. Todas las empresas nuevas de la historia han tenido que recurrir a estrellas ya consolidadas, tal como pasa con NJPW y Antonio Inoki Inoki, UWF-I con Satoru Sayama, AAA con todos los nombres que le sacaron al CMLL y un largo etc. O lo mismo cuando la empresa se expande, como pasó cuando la misma WWE esquilmó a AWA y a la mitad de los territorios de sus grandes estrellas partiendo por Hulk Hogan.
La clave está en saber utilizar a las estrellas propias y podría decirse que el bookeo de estos nombres masculinos no va para nada mal. Kenny Omega y los Young Bucks han podido salir del nicho independiente en USA y convertirse en estrellas cada vez más grandes para el casual, y a su vez, hay gente antes bastante desconocida que gracias a AEW están convirtiéndose por primera vez en estrellas: Adam Page, MJF, Sammy Guevara, Darby Allin y un largo etc.
Es innegable la popularidad que Britt Baker alcanzó venciendo prácticamente a puras luchadoras que no estuvieron en WWE. Pero me parece innegable que incluso ella es menos estrella que The Four Horsewomen al completo, Bianca Belair, Asuka o Alexa Bliss sin ir más lejos. Y es que mientras que a WWE se le han escapado grandes nombres masculinos, no pasa lo mismo con las chicas. De momento el gigante ha logrado acaparar a las estrellas de la división.
Sasha Banks podría cambiar radicalmente las reglas. La estela de su nombre supera por mucho a toda la división femenina de AEW, pero por sobre todo, lo mejor del caso es que es muy buena. Salvo para algún que otro hater con ínfimos conocimientos en wrestling, es evidente que la chica es garantía de buenos combates. Y que por igual, es carismática, popular y sinónimo de buenas ventas en mercadotecnia.
A AEW le falta una gran estrella y ella puede ser Sasha Banks. Y asimismo, AEW quizás no sea una plataforma tan grande como WWE para Sasha. Pero eso lo puede compensar obteniendo todo lo que absurdamente se le ha negado en WWE.
El caso Naomi
Por supuesto, este artículo es sobre Sasha Banks, no sobre Sasha y Naomi. Y es porque mientras una Sasha en AEW me parece una opción sumamente atractiva por donde se le mire, creo que Naomi solamente llegaría a bajar la calidad del show.
Más allá de su agilidad, es quizás imposible encontrarle alguna cualidad en el ring a Naomi. Y es que francamente no tiene nada de exagerado el epíteto “nefasta” cuando se trata de ella. Probablemente no tiene siquiera un combate recomendable en su carrera y en cambio, es fácil recordar varios encuentros desastrosos a su haber.
Pero incluso fuera del ring, hablamos de alguien que carece del carisma que supuestamente le otorga andar como un árbol de pascua cada vez que entra al ring. Mencionar que fue parte de la olvidada división femenina pre Four Horsewomen, para luego ser premiada con un título femenino en la cara de Becky Lynch y el 2017 con un nefasto reinado de seis meses que nadie recuerda.
Naomi tiene el caché de haber campeonado en WWE, de tener una base de fans y posiblemente llegaría con momentum a raíz de la polémica. En base a ello, cabe deducir la chance de que AEW la fiche y que su llegada implicaría un retroceso de importancia de luchadoras mejores. Gente como Jamie Hayter, Tay Conti, Serena Deeb, o resumiendo, casi todo el roster. ¿Quién es más mala que Naomi en AEW?.
Hay quien se ha quejado de los malos efectos de Sasha Banks y Naomi llegando a AEW, y el daño que esto le haría al roster original. Con Sasha estoy muy en desacuerdo claro, pero en cuanto Naomi concuerdo en que ojalá nunca llegue.
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Profesor de Historia, conocido en las redes sociales como Meñique. Bienvenido a un reino en que está prohibido hablar bien de las últimas temporadas de Games of Thrones y dónde la religión oficial es el culto a don Minoru Suzuki.