Pero tranquilidad ante todo, que Nacho no será borrado de este proyecto, menos desde que me ayudó mucho en sacarlo adelante. Ahora, nos organizamos e iremos dividiendo por meses la tarea. Así lo irán leyendo tanto a él como a este servidor. Dicho eso, vamos con el Royal Rumble del 96 de WWE.
Ahmed Johnson vs Jeff Jarrett.
Meh. Lo más rescatable es cuando Jarrett le pega tremendo guitarrazo a Johnson causando la descalificación.
Valoración: 1 jumbito.
The Smokin’ Gunns (Billy & Bart) vs The Bodydonnas (Skip & Zip), WWE Tag Team Championship.
Qué aburridos se me hacen los Smokin’ Gunns, carentes de carisma haciendo ver a los Bodydonnas como si fueran lo más entretenido de la toda la división de pajeras.
Lucha tag genérica número 14560039203039393039. Más enciman retienen los troncos.
Valoración: 1 jumbito 3/4.
Goldgust vs Razor Ramon (c), Intercontinental Championship.
En esta revisión me decepcionó el enfrentamiento, al cual recordaba con mejor cariño en especial cuando hicimos el top de combates por el IC. Lo más rescatable son los juegos mentales de Goldust, aprovechando todas las bondades de su gimmick para provocar y terminar descolocando al campeón. El resto, bien pocazo pensando en que ambos son dos buenos wrestlers y por la aparición del Kid. Muy cansina esta rivalidad.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
Royal Rumble match.
Un Royal Rumble muy interesante del que puedes ir rescatando diversas situaciones. En primer lugar tenemos el regreso a la empresa de Jake Roberts, que lo hizo acompañado de un muy buen pop. También tenemos la típica declaración de intenciones con algún valor joven, en este caso fue Hunter Hearst Helmsley, quien duró 48 minutos. Acá ya patentan cierto push que sabemos se irá al traste prontamente….
Otro gran hito es el debut en WWE de Vader (ver homenaje de Nacho) a quien hacen ver bastante fuerte, eliminando a Roberts, a los mastodontes del Squat Team (que si no tienen el peor debut de la historia pega en el palo) y a Savio Vega. En su participación destaca los problemas con Yokozuna, ambos representados por Cornette que siempre evita que la situación escale. Por eso la eliminación de ellos a manos de HBK resulta tremenda.
Desde ese momento el combate se torna medio monótono y se hace bastante predecible, aunque la complicidad Diesel/Michaels está llena de simbolismo en el final con HBK eliminando a su amigo y ex campeón.
PD: Increíble que un pobre diablo como Holly haya durado tanto, menos mal lo elimina el Ringmaster. Y la estrategia de Jerry Lawler escondido debajo del ring fue divertida.
Valoración: 3 jumbitos 1/4.
The Undertaker vs Bret Hart (c), WWE Championship.
https://www.youtube.com/watch?v=73k_6gEnShY
Para el tipo de este video, una de sus luchas favoritas de todos los tiempos. Cómo serán las que no le gustan…
Antes de comenzar el match, durante la entrada del Taker, este se topa con Diesel generándose un brawl (ya tuvieron un careo semanas atrás). No es mala idea para comenzar una rivalidad.
Vamos a la lucha:
Uff, que terrible main event. Taker en modo “The Walking Dead”, ofreciendo nada atractivo y a un ritmo soporífero, con movidas de descanso que me hicieron preguntar por qué chucha estaba viendo esto.
Una lástima por Bret Hart, que cuando domina muestra un atractivo ataque a la pierna pero que no sirve de nada porque aparece Diesel y le cuesta el duelo a un retador que queda como el gran perjudicado dejando al canadiense como un pelele. Muy flojo fue esto.
Valoración: 2 jumbitos.
Debido a que WCW recién tendrá evento en febrero, la decisión de quién gana se tomará contando el Royal Rumble y el próximo In Your House versus aquel PPV de la empresa de Turner.
En pleno Road to Wrestlemania, es normal recordar a luchadores que han brillado en el magno evento, así como las circunstancias que los llevaron hasta allí. En esta ocasión, me referiré a uno de los casos más interesantes de todos los tiempos: el run que llevó a Daniel Bryan al Main Event de Wrestlemania 30.
Texto muy contingente si vemos el actual camino al máximo evento, donde parece que se repite la historia con Becky Lynch, despojada de su chance de enfrentar en WM a Ronda por la decisión de su jefe. Historia que parece que también la vivirá Kofi Kingston. ¿Ángulo reciclado o la mejor forma de hacer importante una rivalidad?
Lo cierto, es que la figura de poder corporativo versus la unión de las masas siempre genera ruido en la audiencia.
Para este artículo, traduje un capítulo de “You can´t wrestle! – Profetional Wrestling as Participatory Fiction”. Corresponde a una Tesis de posgrado, escrita por Aleksi Vauhkonen y presentada el 2018 en la universidad finlandesa de Helsinki. El estudio completo es posible encontrarlo a través del siguiente link https://helda.helsinki.fi/bitstream/handle/10138/235683/Vauhkonen_Aleksi_Progradu_2018.pdf. El autor analiza el rol de las audiencias en vivo sobre la práctica del wrestling y en este capítulo en particular, como el fenómeno de Daniel Bryan obligó a los bookers a cambiar los planes de Wrestlemania 30.
Al igual que en otras traducciones, he hecho algunas modificaciones al texto para simplificar su compresión. La traducción la dejo a continuación:
En el 2010, fue la misma WWE quien entrenó principalmente a sus propios luchadores, pero Bryan Danielson fue una excepción a este modelo. Cuando Danielson debutó en la televisión de la WWE en el 2010, ya había luchado en la escena independiente por una década. La reputación de Danielson era la de ser el rey de las indies, pero siempre fue considerado de estatura muy baja y quizás demasiado insípido para ser una personalidad Main Stream. Su personaje de la WWE fue eventualmente renombrado “Daniel Bryan”.
Curiosamente, WWE no tuvo reparos en hacer que (como personaje) el indie de Bryan fuera introducido como “novato” en el nuevo programa de televisión de la WWE, NXT. Daniel fue guiado por The Miz, una ex-estrella de reality que se convirtió en luchador. Su camino para las grandes ligas no podría haber sido más diferente que el de Bryan. The Miz abrió el show diciéndole a los fanáticos que Daniel era un “Internet darling” (término despectivo que apunta a alguien querido por el fan smart) y que tenía que mostrar personalidad para tener éxito en WWE.
Las palabras de The Miz eran el eco de la creencia de WWE de que los luchadores independientes no eran los grandes personajes que podrían capturar la imaginación del público en general, o del informal espectador de televisión. Sea como sea, la tenue relación entre WWE y la escena independiente estaba ahora en exhibición en el mundo ficticio de WWE por primera vez. El líder de la industria había reconocido que había una subcultura del wrestling cuya influencia era innegable.
El camino de Daniel Bryan al evento principal de Wrestlemania 30 fue poco probable. En medio de su debut en el 2010 y Wrestlemania 30 en el 2014, trabajó principalmente en luchas preliminares. Pero su popularidad se había vuelto innegable, y lo llevó a luchar por el WWE Championship en el evento principal de Summerslam en agosto de 2013. Sin embargo, Bryan perdió el título y pasó de nuevo a un segundo plano.
De acuerdo al escritor de deportes Jonathan Snowden, Bryan no logró el éxito financiero suficiente como el principal atractivo de un PPV importante. El mismo Vince McMahon, le dijo a los accionistas que Summerslam 2013 fue un “meet and greet”. Parecía que The Miz tenía la razón en el 2010 y que a Daniel Bryan le faltaba el atractivo para ser Main Stream. Sin embargo, la popularidad de Daniel Bryan nunca se desvaneció, y sus fanáticos estaban empeñados en mostrar su apoyo. En otras palabras, la opinión del mercado de valores sobre Bryan no fue compartida por los mismos asistentes.
El 9 de diciembre de 2013 en Monday Night Raw, WWE realizó una ceremonia para unificar los dos campeonatos mundiales de la compañía, mientras que el nuevo campeón se decidiría en el siguiente PPV. La ceremonia fue precedida por Stephanie McMahon y Triple H, y también participaron un grupo de ex-campeones, entre ellos Daniel Bryan. El segmento debía incluir un diálogo preparado entre McMahon, Triple H y los participantes del encuentro por el campeonato: John Cena y Randy Orton. Sin embargo, los procedimientos fueron interrumpidos por la audiencia en vivo de una manera que secuestró el show.
La multitud comenzó a cantar implacablemente el nombre de Daniel Bryan sobre el parlamento guionizado de un Triple H visiblemente nervioso y no tuvo más remedio que reconocer a la multitud. Mientras que Daniel Bryan se reía en la esquina del ring. Bryan se suponía que tenía simplemente un papel de fondo en el espectáculo, pero la audiencia en vivo lo lanzó al centro de atención,para gran consternación de la producción de WWE. Parecía que a partir de este momento, la empresa no tendría más remedio que ceder, pero en su lugar continuó dándole empuje a otros talentos a expensas de Bryan, casi como un insulto directo al público televisivo.
El 26 de enero de 2014, la WWE celebró Royal Rumble. Daniel Bryan había luchado y perdido en un encuentro preliminar en el show, pero la audiencia en vivo clamó a Bryan para que también participara en el Royal Rumble match. La gente no se mostró tímida con respecto a mostrar su apoyo durante el combate, cantando su nombre en todo momento y abucheando a casi todos los demás participantes. Sin embargo, la aparición de Bryan en el combate no se iba a dar.
Cuando el favorito de los fanáticos Rey Mysterio entró de n° 30, la multitud procedió a abuchearlo de forma despiadada. El ambiente en la arena desde este punto fue surrealista, con la multitud expresando en voz alta su desaprobación por todo lo que veía. Finalmente, el combate fue ganado por Batista, cuyo enojo por no haber sido aceptado por la multitud era evidente. En el futuro, WWE ya no pudo negar el poder de la audiencia en vivo sobre el mundo ficticio que se les presentaba. El público quería a Daniel Bryan y si la WWE continuaba defraudando a la gente, lo haría a riesgo de que su principal show Wrestlemania, también fuera secuestrado.
Originalmente, Wrestlemania 30 iba a ser encabezado por Batista, una antigua cara, desafiando al campeón actual Randy Orton. Además, ambos eran ex-protegidos de Triple H. Sin embargo, WWE cambió el guión y de repente empujó a Daniel Bryan a la historia principal en Monday Night Raw, en el episodio del 10 de marzo de 2014. Esa noche, Bryan reunió a un grupo de sus fans, llenó el ring en medio de la arena y le exigió a Triple H un combate en Wrestlemania 30. Sería un encuentro que si Bryan ganaba, le daría un lugar como tercer participante en el combate por el WWE Championship.
El personaje de Daniel Bryan, literalmente secuestró el programa de televisión ficticio al igual que lo había hecho la audiencia simbólicamente antes. WWE lo llamó “Occupy Raw” como un guiño al movimiento “Ocuppy” de Wall Street. El enojado Triple H, como símbolo del poder corporativo, estuvo forzado a arrodillarse ante las masas unidas. Finalmente accedió a las condiciones, estableciendo el escenario para que Bryan triunfara contra todo pronóstico.
Esencialmente, WWE se apropió del movimiento popular de la vida real detrás de Daniel Bryan y lo convirtió en una gran historia dentro de su mundo ficticio. El hecho de que a WWE le tomó realmente tanto tiempo reconocer lo que querían los fanáticos solo hizo más grande el clímax. Bryan abrió Wrestlemania 30 derrotando a Triple H y cerró el show derrotando a sus dos protegidos, Batista y Orton. Y de pasó ganó también el WWE Championship, todo en frente de 75.000 fanáticos.
Que la situación de Daniel Bryan efectivamente haya trascendido a los fans smarts y llegó a la escena Main Stream puede ser debatido. Wrestlemania 30 fue un éxito financiero, pero es difícil decir si se debió a Bryan o simplemente al hecho de que Wrestlemania es el show más grande en el calendario de la WWE y que todos los Wrestlemanias son considerados exitosos.
Lo que no se puede debatir sin embargo, es que las audiencias en vivo de este tiempo dictaron la historia principal que la WWE debía contar. La gente quería ver al gigante corporativo que es WWE de rodillas, delante de ellos, tanto en el mundo ficticio como en la vida real. Concedido, WWE en última instancia cosechó las recompensas financieras, pero el empoderamiento que sintió la audiencia cuando Daniel Bryan consiguió su Wrestlemania moment fue palpable.
He leído muchas críticas contra el Royal Rumble masculino y comparto hasta cierto punto. Pero aún a pesar de la escasa construcción de Seth Rollins o el mal bookeo de Ambrose, creo que tiene momentos rescatables. No vi acá un desfile de atrocidades como el del 2015. Para profundizar en lo positivo pero también en lo que salió mal, he hecho esta selección de momentos para retomar lo que fue el combate y darle una segunda mirada.
El duelo de músicos
Elias y Jeff Jarrett fueron respectivamente n° 1 y nº 2. Quedaba para la apertura no solo un duelo entre músicos sino que además de dos generaciones distintas. El drifter que ahora se ha hecho un nombre entre el público de Raw y una leyenda que alguna vez pretendió ser una gran estrella de Rock. Elias se impuso golpeando a Jarrett y como no podía ser de otra forma, con la guitarra, algo que fue tan característico en ambos.
Hay esperanza para Johnny Gargano
Siempre ha habido algo de incertidumbre sobre el trato que recibirán Gargano o Ciampa en el main roster, considerando que no tienen el físico tradicional. Pero algo de esperanza tuve cuando en el nº 6 sonó la música de Johnny y más todavía cuando le tocó a él eliminar a un ex campeón Mundial como Jinder Mahal. Interesante esta primera interacción con el main roster.
Entrando con estilo
Samoa Joe (nº 8) entró al ring, le tiró su toalla a la cara del rival y arrasó con todos. Luego, le rasguñó los ojos a Big E (n° 5). para sacarlo del ring y acto seguido le tiró de una patada la toalla con burla. Joe nunca se había metido a un Rumble y sin ser tan relevante supo hacerse notar cada vez que tuvo el spot. Hay que decirlo, ahí se vio mucha más personalidad que cuando entró Seth Rollins (n° 10).
Titus repitiendo la historia
Titus (nº 11) llegó corriendo por la rampa haciéndonos recordar el divertido botch de Greatest Royal Rumble. Paró en seco asustado y justo entonces se encontró con que Curt Hawkins (nº 9) se había escondido bajo el ring. Comenzó la persecución y una vez más tuvimos a Titus entrando por debajo de la lona. Yo al menos me divertí mucho y esto sólo mejoró cuando instantes después ambos jobbers terminaron eliminados.
La salvada anual de Kofi
No mucho después de su llegada, Ambrose (nº 14) tenía a Kofi (n° 12) fuera del ring pero con un pie apoyado en el borde. No obstante, Kingston como siempre se la supo sacar, en esta ocasión haciendo rodar sus pies. Sin embargo eso solo sería el calentamiento. Lasalvada real llega cuando es casi eliminado y se afirma de Xavier (nº 17) quien justo estaba parado fuera del ring. Me causó gracia y lo mejor es que instantes después Drew (nº 16) se deshizo de ambos.
Drew McIntyre destruye a No Way Jose y sus amigos
Fue muy extraño ver que No Way Jose (nº 15) llegaba con una multitud solamente para ser eliminado en dos segundos. Pero todo cobró sentido cuando la siguiente entrada en sonar fue la de Drew. El escocés no es un as transmitiendo un personaje, pero al menos sabe mostrarse como alguien imponente y de malas pulgas. Aquí se ve bien cuando golpea a Jose y varios de esos pobres desconocidos.
The Bruiserweight entra al Rumble
No hay nadie que parezca más alejado del main roster que Pete Dunne. Por ello, escuchar su música en el nº 18 fue bastante emocionante para mí. Puede que sea el presagio de un próximo ascenso o bien una forma de promocionar el NXT UK. Pero sea como sea, da gusto ver a alguien tan talentoso luciendo bien en el mítico Royal Rumble match.
La extraña eliminación de Ambrose
La entrada de Aleister Black (nº 21) fue bastante sorprendente. Pero esto quedó totalmente empequeñecido en cuanto él se volvió protagonista de la eliminación de la noche. Dean Ambrose que había entrado a la mitad del combate parecía tener todas las fichas para terminar entre los últimos. Y en vez de eso, cayó como un pobre diablo ante alguien que nunca ha estado en el main roster.
Ajeno a quien lo eliminó, tampoco es que Ambrose haya hecho algo relevante en la contienda. Solamente hizo una eliminación (Gargano) y estuvo menos de 13 minutos en el combate. No soy gran fan del medio lunático pero aún así no veo la lógica en esto y entiendo a los fans, heridos ante el ninguneo de quien fue uno de los grandes nombres de esta generación. Quién sabe, quizás esto tenga que ver con la aparente salida de Ambrose de WWE.
Mustafa Ali se la juega a Samoa Joe
Joe y su actual enemigo se dieron y no consejos buena parte del combate, hasta que Samoa recibió una superkick de Shelton Benjamin (n° 22) y Ali (nº 13) aprovechó la oportunidad de eliminarlo. Es notable ver la furia y frustración reflejadas posteriormente en el rostro de Joe. Me agrada que haya storylines con continuidad en el Rumble y también el hecho de que esto es una apuesta por el talento joven en toda su expresión. Cabe destacar además que Mustafa y Joe fueron respectivamente los luchadores que más duraron después de Rollins, con 30 minutos y 23 minutos respectivamente.
Rollins es apartado del juego
Rollins elimina a Lashley (nº 26) en cuestión de segundos, que es la parte rescatable de la situación. Pero luego, el morenazo enojado arrastra a Seth por debajo de la cuerda para darle una paliza en ringside. No puedo contradecir a quien me diga que el spot estuvo mal planteado. El gran candidato es atacado cuando quedan pocas entradas para el final en un spot destinado a llamar la atención del público e involucrarlo. Pero lo que quedó realmente es el spoiler de que tendríamos a ese obvio candidato merodeando de nuevo por el final del combate.
Ocasionalmente la estructura de este encuentro exige que un luchador desaparezca fuera del ring por un rato, ya sea para descansar o para darle más cámara a otros luchadores. Pero en esos casos lo que más funciona es sacarlos sin usar un gran spot. De hecho, en este mismo Rumble Braun (nº 27) desapareció tras chocar con el esquinero y fue más fácil olvidarse de él hasta su regreso.
El regreso de Dolph Ziggler
Tras desaparecer por semanas, Ziggler (nº 28) tuvo su regreso eliminando a McIntyre con una Superkick. La eliminación es comprensible en caso de que se esté planeando un combate en Wrestlemania entre los dos ex-compañeros. En caso contrario, creo que fue un error ya que Drew sonaba como candidato y podría haberle dado más juego a los minutos finales. Al menos, la Superkick de Ziggler también le llegó a todos los periodistas que daban por hecho su salida de WWE.
Nia Jax se roba el lugar 30
R-Truth era una opción muy débil para entrar de nº 30 y había mucha especulación sobre la posibilidad de que un participante sorpresa le robase el lugar. Finalmente ocurrió eso, pero nadie se adelantó a la identidad del luchador o luchadora en este caso. Nia se une a ese selecto grupo de mujeres que ha entrado a un Rumble masculino y ha dado entre ellas la mejor performance que se recuerde de este tipo.
La paliza a Nia
Nia llegó jugando con el hecho de que era mujer por lo que no podían hacerle daño, pero ella en cambio si que podía. Hasta que agotó la paciencia de los presentes. Ziggler le dió una Superkick, Rey (nº 25) un 619 y Orton (nº 29) la finiquitó con el RKO. Como si no fuera suficiente, cuando trataron de echar a Nia quedó colgando del borde del ring y Mysterio la remató. El momento del combate.
Es increíble que en estos tiempos la escena de una chica siendo golpeada por unos tipos haya sido tan aceptada. Acá jugaron dos factores. En primer lugar, el odio hacía Nia presente desde hace meses y que más temprano en el evento se reavivó tras el tracionero ataque contra Becky Lynch. Segundo y más importante, que un luchador golpeará intencionalemente a una mujer se había convertido en un tabú para la compañía. Verlo fue como ver de nuevo uno de sus brutales spots con tachuelas y alambre de espino. Guardar un momento así por tanto tiempo le dio una frescura inedita.
Andrade se cuela entre los últimos
Cuando Andrade entró de nº 19 el sentimiento colectivo apuntaba a apoyarlo cuanto tiempo durará en la contienda. Pero las eliminaciones se sucedieron y el seguía ahí. Hasta que Orton eliminó a Rey y sorpresa, el mexicano fue quien sacó al dueño del RKO. Había conseguido meterse entre los cuatro últimos participantes. Se veía de lejos que Andrade no tenía opciones de ganar, pero llegar lejos fue una victoria moral.
El duelo final
Me agrada cuando el Rumble se define en un gran duelo individual y Rollins vs Strowman me parece que cumple esas expectativas. Por otro lado, Braun era el luchador con mayores chances de ganar después de Seth, así que tuve algo de expectación.
A pesar de lo anterior, no soy sordo, el público recibió su victoria prácticamente en silencio. Las reacciones tibias fueron tónica de toda la velada, pero no es que Rollins haya hecho muchos méritos. Su participación duró 43 minutos, es decir tres cuartos del combate. Y aún así es muy difícil recordar algo que haya hecho durante todo ese tiempo. Su escasa presencia en este recuento de momentos asociados al combate es prueba de ello.
Para finalizar, reafirmo lo expuesto originalmente. El Rumble no es muy bueno ni muy malo. No vi leyendas llegando a eliminar luchadores o excesivo protagonismo de los momentos graciosos. Por otro lado, trataron bien a los recién llegados al main roster y a los que están por llegar. Decir que es de los peores Rumble, es una calentura por Rollins y Ambrose.
Bobby Roode (c) & Chad Gable (c) vs Rezar & Scott Dawson.
Por Nacho Meñique.
De por sí ya era muy random el tag team entre Roode y Gable, pero la cosa se puso onírica en cuanto los miembros no lesionados de Authors Of Pain y Revival se unieron. El combate es interesante porque deja ver la falta de capacidad que tienen los heels de colaborar y funcionar como equipo. Ambos se demoran en seguir las indicaciones del compañero y dudan con los relevos, cosa que no ocurre con los campeones. Aún así tiene fallas, tales como la falta de tiempo, el final poco emocionante y claro, el nulo interés de la grada.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Rusev (c) vs Shinsuke Nakamura, United States Championship.
Por Nacho Meñique.
Si Nakamura se dedicara a vender hand rolls en la calle lo respetaría un poco aunque sea.
Valoración: 2 jumbitos el encuentro, DUD la decisión.
Por Hit.
El producto de Aiden vs “El mayor displicente del Main Roster” se enfrentaban una vez más.
Bueno, la lucha no fue tan mala como esperaba (sobre todo teniendo a un Nakamura modo mediocre hace 2 años aproximadamente). Tuvo lapsos interesantes, desde que Nakamura empieza a aplicar los movimientos de sumisión en adelante.
Sin embargo, el final es horrendo. Las actuaciones de todos los involucrados (incluyendo al nefasto del árbitro) son de lo peor, no pudiendo generar convicción a un espectador con un mínimo de inteligencia. El árbitro y Rusev quedan como unos Nachitos (payasos).
PD: De ganar el Rumble pasado al Kickoff. Que grande eres Nakamura.
PD 2: Que Lana se quede en Total Divas. No es aporte como manager de Rusev y le ha quitado interés. Que vuelva Aiden English.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
Buddy Murphy (c) vs Hideo Itami vs Akira Tozawa vs Kalisto, Cruiserweight Championship.
Por Nacho Meñique.
No importa lo bueno que fueran los participantes, entre cuatro es muy difícil desarrollar algo que no sea un spotfest. Y ahí lo único que se desliga de esa tendencia, es el pasaje inicial en que Itami baja del ring porque los considera indignos de él y recién vuelve a subir cuando Murphy está dominando para tener un mano a mano. Pero spotfest y todo, al menos es un spotfest divertido y supieron involucrar al público, algo difícil cuando se trata de los cruceros.
Valoración: 3 jumbitos.
Vamos con el show principal -y eterno-.
Asuka (c) vs. Becky Lynch, Smackdown Women’s Championship
Por Rockstar.
Gran combate, sin una gran storyline que las respaldara, el enfrentamiento era un choque de calidad, similar al de Asuka y Charlotte en Wrestlemania. Acá no hay un villano sobre el ring, se pelea para ser la mejor.
Es una lucha muy competitiva, sin dominios marcados, en ese sentido se agradece la innovación en algunas movidas como Becky haciendo el disarm-her con ayuda del esquinero, o esa variante de desnucadora que ejecutó Asuka desde el apron hacia fuera del ring.
Me quedo corto con las palabras porque ya han pasado unas 5 horas desde que vi el choque, más pensando en la duración del evento el evento. Pero que bien logradas fueron las transiciones entre llave y llave sobre el final de la lucha. Se disfrutó mucho, además, su amplio arsenal de sumisiones.
Quizás mi único reparo es que no hubo un limbwork muy marcado, pero por como se terminó dando el combate, me parece que no pesa much. Lo otro que resta es el público, que solo al final se involucró por completo (como no hacerlo con ese tremendo final), aunque después descubrimos que los paletos eran así, no se prendieron en exceso con nada.
Becky y Asuka son unas guerreras.
Valoración: 4 jumbitos 1/4.
The Miz y Shane McMahon vs. The Bar (Cesaro y Sheamus) (c), Smackdown Tag Team Titles.
Por Hit.
Digno de WWE Main Event. Nada destacable.
Valoración: 1 jumbito y medio.
Ronda Rousey (c) vs. Sasha Banks, Raw Women’s Championship.
Por Hit.
Lucha que tiene un ritmo tremendo y que deja claro el planteamiento que quieren dar: Sasha como una experta y con grandes conocimientos en el ring, mientras que Ronda es algo más novata, pero que aprende rápido.
Es un match totalmente físico (al igual que el Becky vs Asuka), pero creo que este involucra un poco más al público (el factor Ronda es muy importante). Lo que más destaco del match es el desenvolvimiento de Sasha (con tintes de heel durante todo el duelo), ya que es ella la que tenía que aprovechar esta oportunidad para demostrar que tiene el nivel para volver a las posiciones estelares dentro de la división. Acá lo logra.
El encuentro es bueno, pero conociendo a las chicas, creo que tiene un margen de mejora para entregar algo aún mayor. Espero una revancha pronto.
Valoración: 4 jumbitos 1/4.
Por Nacho Meñique.
Volvieron los tiempos mejores, los de Sasha dando un combate tremendo y acallando las criticas de toda la ICW. Al principio Ronda dominaba bajo amenaza de squash y hasta un intento de Banks Statement casi terminó con el brazo de Banks atrapado. Pero Sasha es muy buena para las sumisiones en otro sentido: transmitiendo ganas de hacer daño. Por ejemplo, cuando dobla ese brazo y tira de los dedos.
A lo largo del encuentro Ronda va a intentar aplicar una y otra vez su armbar, para terminar fracasando ante una chica más escurridiza. Y en cuanto consigue realizar su llave mortal (tras notable secuencia en la que agarra a Banks en Suicide Dive) no le servirá de nada ya que será fuera del ring. El final con ambas destrozadas dándose a puño limpio me parece muy entrañable y más aún cuando Rousey debe renunciar a la idea de hacer rendir a Sasha para poder derrotarla.
Valoración: 4 jumbitos y medio.
Royal Rumble femenino.
Por Nacho Meñique.
Malísimo todo hasta la entrada 26 más o menos. De esa enorme franja de tiempo hay poco que recordar, salvo tristemente los WTF ocasionales. Luego comienzan a llegar algunos pesos pesados de la división, y WWE plantea algo muy en deja vú de lo de Daniel Bryan con las 30 plazas ocupadas y Becky por ningún lado. Hasta que hacen la inteligente solución de que la irlandesa reemplace a Lana, quien se lesionó en el kick-off.
El final es una pequeña maravilla. Cuando todo parecía que sería otro Becky vs. Charlotte, la eliminada Nia arremete una vez más contra la irlandesa, en esta ocasión destruyendo su pierna. Charlotte de la preocupación pasa a la felicidad. Becky está tan mal que, cuando sube corriendo al ring, se tropieza y cae. Y la Flair por supuesto, arremeterá con todo contra esa rodilla. Pero…
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Por Rockstar.
Poco potente la verdad, sin grandes nombres sobre todo al inicio, con una Nikki muy interesante teniendo un papel menor, Ruby y Ember nada destacable, Natalya robando como siempre, Alicia payaseando, Alexa irrelevante. Lo que sí voy a rescatar es que hubo una historia, al menos se respetó la storyline de Naomi con Mandy, cosa que a nadie le importa, pero es una historia de todas maneras.
Otro punto es lo entretenida que es Zelina. El resto es relleno hasta que llegamos al final entre Becky y Charlotte, con esta última arrojándose como una piraña contra la rodilla de “The Man”, para así lograr aún más dramatismo y transformando la proeza de Lynch en algo inolvidable.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Por Hit.
Un bodrio (salvo algunos pops en las entradas) hasta que llega Becky. Se dice y no pasa nada (como diría un vejete querido).
Hay unas luchadoras como Ember Moon, Natalya y sobre todo Lacey Evans, que estuvieron muchos minutos en la batalla real y pasaron totalmente desapercibidas. También debo recalcar lo horrible del bookeo de las eliminaciones, ya que varias se producían mientras otras luchadoras realizaban su entrada, descolocando al espectador.
Sobre el Becky vs Charlotte al final, me encantó. Becky pudo involucrar al público y tenerlo totalmente a su favor y Charlotte ayudando para ello.
PD: Lacey cono.
Valoración: 2 jumbitos1/4.
Daniel Bryan (c) vs AJ Styles, WWE Championship.
Por Nacho Meñique.
Tremendo combate aún a pesar del público y de ese extraño final. AJ molesto con las humillaciones que fue sumando, comenzó atacando sin darle ni un respiro a Daniel, aunque, como se vería después, poco ganó en esa fase de dominio. Bryan consiguió meterle un duro derechazo que le rompe la nariz y luego lo esquiva haciendo que se golpee el brazo con el poste. De aquí en adelante comienza la epopeya de Styles aguantando los ataques contra su brazo (aunque al principio no lo vende mucho), pero sin duda lo peor serían los golpes a su cara sangrando.
AJ poco a poco comienza a lastimar la pierna y el encuentro se convierte en un limbwork vs. limbwork. Lo mejor es que no solo hay mar de secuencias notables, sino que además momentos en que el mutuo odio se ve muy personal. Por ejemplo, cuando Bryan encaja el Yes Lock! y lo hace introduciendo sus dedos en la nariz rota. O el momento en que AJ trata de hacer el Phenomenal Phorearm y su brazo lastimado lo atrasa, permitiéndole a Daniel recibirlo con una patada en la extremidad.
En cuanto al final, esa intervención de Rowan que justo (milagrosa coincidencia) se da con la caída del referrí, resta por donde se le mire. Me recuerda bastante a ese HBK vs. Benoit de Raw en el 2004, una genialidad que quedó en paso atrás gracias a la intervención de Triple H.
Valoración: 4 jumbitos 1/4.
Por Rock.
Claramente sus luchas son anti paletos, ya que tienen un ritmo tan pausado, que se entiende que no logren involucrar a todos los espectadores, pero por esta razón, siendo una saga extraordinaria, este combate se ha catalogado como el más flojo. Malo no me parece, bajo ningún punto, estaba bien pero como el booking apuntaba a un final así, creo que no había espacio para hacer mucho más.
Siempre bien el selling de estos dos grandes wrestlers, lo que se alcanzó a ejecutar en el ring salió perfecto.
No hay mucho más que decir, quizás para tanta enemistad este enfrentamiento debió tener una estipulación, esta fue como su cuarta single en un periodo de tiempo muy corto.
Larga vida al reinado de Bryan.
Valoración: 3 jumbitos 3/4.
Brock Lesnar (c) vs. Finn Bálor, campeonato universal
Por Rockstar
Buena y entretenida lucha, pero tampoco hay que pisarse la capa entre superhéroes. Creo que todos nos imaginábamos un combate así o de una estructura similar. Lo que más me gustó es que el Suplex City no fue para nada largo y odioso, al contrario, en esta lucha Lesnar fue más vulnerable de principio a fin, así logrando la principal diferencia a sus luchas anteriores con rivales pequeños.
Finn estuvo bien, se las arregló para complicar de gran manera al campeón, la clave del éxito del match fue lastimar el abdomen de Brock con la mesa de transmisión, con ese valor agregado, se dio un enfrentamiento mucho más creíble.
La critica puede ser el final abrupto, no hubo un falso final, solo el Coup de Grace, ni siquiera hubo necesidad de sacar el F5, pero en fin, match de transición bien logrado, poco más.
Valoración: 3 jumbitos 3/4.
Por Shut.
No estaba previsto para participar en la review del Rumble por diversas circunstancias, pero entre Nacho y Hit fallaron con la segunda “patita” de este combate, que tuve que venir a parchar.
Y bueno, no me desagrada tanto cuando estamos en frente de un match que logró cumplir mis expectativas. Lesnar tiene una magia que pocos pueden sacar pecho , y es esa forma para que nosotros, el público, logre involucrarse en sus encuentros. Por eso cada comeback de Bálor se disfrutó mucho. Buenas secuencias, lindos momentos, todo unificado para entregar gratos pasajes.
Mi queja, como la de varios, pasa por el final. Con unos cinco minutos más, creo que podríamos haber estado en presencia de un match muy sólido.
Valoración: 4 jumbitos.
Royal Rumble Masculino.
Por Rockstar.
Lo mismo que el femenino, pero algo peor en el sentido que se notó lo floja que es la camada de gente que está en el roster, con muy pocos personajes y muy poca gente que esté realmente over. Me faltó Zayn, Owens, Cena y alguna otra figura importante para darle más trascendencia a esto, que a ratos parecía más battle royal que Royal Rumble, porque tuvo muy poco peso la verdad y no se sintió muy importante.
La que me parece realmente notable, es que dejaran abierta la posibilidad a que una mujer pueda recibir movimientos de un hombre, cosa que hace mucho no se veía en el main roster, a la postre, es lo que más rescato del momento Nia Jax.
Y otra cosa positiva por resaltar, es que se dejó al talento joven y actual sacar las dos batallas reales adelante, no hubo leyendas que chuparan cámara como una Trish o Lita siendo eliminadas por algún cono que no valga la pena, así que bien ahí también.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Por Hit.
Creo que fue bastante mejor que el Royal Rumble femenino, pero aun así, fue bastante mediocre. Se sintió bastante desordenado y que se desarrolló de una manera muy apresurada, no dejando tiempo para careos (por ejemplo, Ambrose y Rollins con suerte se golpearon).
Es verdad que tuvo unos momentos interesantes (como el de Nia, ufff momentazo), pero la mayoría se olvidará en dos días.
Sobre las entradas y eliminaciones, no sé qué decir. Se respeta poco el status que tiene cada uno dentro de la marca.
Sobre el ganador, no recuerdo una actuación tan pobre del ganador del RR en años (sí, pudo superar a Nakamura). Cuando Lashley lo sacó y lo atacó, este ni siquiera fue abucheado. La gente pasó de Rollins en la mayoría de la batalla real. Es impresionante que no genere la empatía necesaria dentro del mismo público que lo agranda y defiende en redes sociales.
PD: El momento del triunfo de Becky se come a toda la carrera de Rollins como face.
Época de Royal Rumble, y a decir verdad, mi favorita del año. El cariño que le tengo a este ilustre PPV, sobre todo a su magnífica Batalla Real, es algo que no se negocia. El hecho de simplemente escuchar al público corear al unísono la cuenta regresiva, o la alarma al llegar a cero para dar la bienvenida a un nuevo luchador cada 90 segundos, es algo que aún despierta emociones de niño en mí. Desde muy pequeño me he hecho la idea de que aquel que logra alzarse con la victoria en este enigmático choque de titanes es una leyenda, y con leyenda no me refiero a los veteranos decrépitos y faltos de actividad que aparecen cada tanto después de unas cuantas cirugías y amagos de retiros, sino a aquellos que están más que capacitados para hacer de WrestleMania el lugar para su coronación máxima.
Y es que es muy importante que haya una historia detrás. Que exista un aliciente único y especial que nos inviten a soñar con el triunfo de alguien que, a priori, es querido por todos. O al menos considerablemente aceptado por una buena fanbase que ayuden a identificar a este personaje como “interesante”. Y por demás, aunque cumple en ciertos aspectos que lo identifican como pilar importante de la compañía, creo firmemente que, en la actualidad, Seth Rollins no está capacitado para un rol de tal magnitud. ¿La razón? Se las cuento.
Con el debut de The Shield, o al menos en lo que a mí respecta, se sabía que las tres superestrellas miembros de dicho stable serían muy importantes a futuro. Por ello, cada uno fue puliendo detalles que los ayudarían a ser identificados por la audiencia de una forma mucho más rimbombante. Dean Ambrose, líder indiscutido en la primera etapa de The Shield, fue el más versátil en este sentido. La transformación por la que ha pasado su personaje a lo largo de estos años no se debe más sino al descomunal talento que tiene como entertainer. En el aspecto in ring, debo reconocer que ha sido bastante descuidado y perezoso. Ha dado algunos buenos combates, muy buenos de hecho, pero la irregularidad ha pesado bastante en el desarrollo de su carrera. Ahora mismo, el papel de heel que representa no es el más óptimo, y por ello, de forma un poco gradual, da la sensación que empieza a quedar un poco al margen. Roman Reigns, el tantas veces criticado, resultó ser mejor de lo que parecía, sin dejar de negar que su manejo creativo ha sido espantoso. La lamentable noticia de su enfermedad ha hecho que se trastoque bastante la escena upper-main carder, teniendo que recurrir a la última de las opciones… Seth Rollins. Seth, a diferencia de Dean o Roman, nunca gozó de mucha evolución sino hasta que traiciona a The Shield. Su cambio a heel, ocupando un rol de protegido por La Autoridad, llevó a la palestra un aspecto interesante en su mayor virtud: Ser burlesco. Su actitud despreciable ha sido lo mejor que Rollins ha mostrado desde que subió al main roster. Sin ser excelente, logró captar mi atención de esa forma y lo reconozco, por ello, su reinado y la longitud del mismo no se me hizo pesada, salvo que en el ring, excluyendo su saga con Ambrose, fue incapaz de dejar algo bueno. De hecho, dejó varias cosas horribles, pero prefiero tratar aquello en otra ocasión.
Su lesión y posterior regreso agitaría un poco el panorama. Su rivalidad con Triple H, lejos de ayudarlo a catapultarse como un nombre importante en el card, lo estancó de una manera impresionante. Y lo triste, es que desde ahí, no ha levantado cabeza en lo absoluto. A pesar de intentar darle frescura a un Campeonato Intercontinental que había pasado mucho tiempo en manos de The Miz, llegó el turno de Seth, quien lamentablemente no llegó a estar a la altura deseada ni en promos, ni rivalidades, ni combates. Reinado totalmente intrascendente que hizo que el “hombre récord” pierda bastante espacio, incluso entre su cuestionable fanbase, que decidió seguir, en un buen porcentaje, el camino de AJ Styles. Cabe destacar que su título intercontinental era considerado el activo más importante de RAW, debido a la constante ausencia de Lesnar y la partida precipitada de Roman Reigns. Una vez más, debía demostrar su valía, pero ya no como un heel tramposo, cobarde y sarcástico, sino como el babyface que debía encender a las masas debido a su estatus de “cara” que iba a tener durante ese tiempo. Su adaptación a ese rol: Fracaso rotundo.
Por mucho que haya tenido un simple campeonato midcard, Rollins era capaz de ser el main event de un PPV, hecho que fácilmente puede ser considerado como la perfecta vara para medir la aptitud de Seth para llevar a sus espaldas posiciones más estelares. Como era de esperarse, el resultado fue un fiasco, y no, no tiene nada que ver que haya sido Ziggler el rival en esa ocasión. El público no siente nada simplemente porque Rollins no expresa nada. No transmite absolutamente nada. Por si fuera poco, se esperaba que el escenario cambie para bien con la inminente rivalidad contra Dean Ambrose, y una vez más, el resultado es espantoso. Simplemente no se puede creer que aquel al que muchos llaman el “top babyface” sea incapaz de mantener un porcentaje ínfimo de interés en el producto que ofrece RAW. El show rojo necesitaba variantes, y claramente Rollins no se las dio. Se debían despejar dudas, pero aparecieron más… ¿En serio él es la futura cara de la empresa?, ¿Él va a reemplazar a Reigns en la escena titular?… ¿Él va a ganar el Royal Rumble y derrotará a Lesnar, Bryan o Styles en WrestleMania?
Otro aspecto a tomar en cuenta es la madurez del luchador. ¿Cuántas veces no vimos a John Cena siendo constantemente maltratado por el “fan hardcore”? ¿Cuántas veces no vimos a Roman Reigns comiéndose rechazos y abucheos tremendamente históricos? Pues lo irónico es que ninguno de los dos se quejó de aquello. Es más, empezaron a disfrutarlo. Es fácil erigirte como estrella, pero qué complicado es erigirte como líder. Rollins es una estrella, líder… ni de cerca, ¿o vamos a olvidar el ridículo que hizo en Twitter únicamente porque el público pasó de él en su Ironman Match contra Dolph Ziggler en Extreme Rules? Tantos aspectos negativos, Seth. En verdad cuesta entender que se le pueda exigir posiciones estelares a un luchador tan mediocre. De aspectos in ring definitivamente no hablemos, primero, porque WWE es una empresa que jamás ha priorizado el aspecto luchístico en sus superestrellas, sino el aspecto llamado entretenimiento, aquel aspecto en el que “la antítesis del storytelling” también flaquea… y feo.
Esto va más allá de si gana o no gana Seth el Royal Rumble. A fin de cuentas, desde el 2010 no vemos un ganador realmente potente y acorde a las storylines y al entretenimiento involucrado. Año tras año WWE se ha esmerado en darnos escenarios pobres, tristes y malos concernientes a la batalla real. Lo que realmente preocupa es que se quiera impulsar y cargar el peso de una marca entera en alguien que lamentablemente no ha dado el suficiente espectáculo en una situación mucho menos comprometedora. Pedir que pase algo como lo anteriormente expuesto, en verdad sería conformarse con muy poco.
¿Es Seth Rollins realmente “el hombre”? Creo que es una pregunta que todos deberíamos hacer. Al menos, por mi lado, la respuesta creo que es bastante clara.
Casi todos tenemos claro que HHH se ha asentado en el main event en momentos que no eran nada propicios para la empresa. La relevancia se obtiene ganando, y más cuando en la victoria se está jugando algo. Este top es para definir esos momentos en que Triple H ganó y trajo consecuencias negativas para la compañía. Por los mismo, es un ranking de momentos, no de combates, ya que aquí lo importante no fue la calidad de los mismos sino que sus consecuencias negativas.
Las victorias que he considerado no van por orden de importancia ni en lo nefastas que resultaron, sino que de manera cronológica. La idea es tener cierta unidad al momento de contar la historia de Trips. Estas tampoco fueron necesariamente las más polémicas, como por ejemplo la de Sting en Wrestlemania 31. A pesar de que fue una decisión horrible en todo sentido, no tuvo mayor trascendencia en la escena del título mundial o el main event.
Royal Rumble match, Royal Rumble 2002.
Hay gente que adoró este Rumble, pero mirándolo seriamente creo que dárselo a HHH fue un tremendo error. El heel más odiado de 1999 y el 2000 se lesiona, la gente lo echa de menos y se supone que una vez de regreso la gente tiene que aceptarlo como el top face de la empresa. Hay una falla estructural en ese planteamiento y que no supieron ver en el momento. Asumieron que por ser la novedad, se convertiría en el favorito de todos. Pero no, la gente siguió teniendo en ese puesto a The Rock y Steve Austin. Si la idea era una opción distinta a ellos, Kurt Angle era el tipo que realmente había estado muy over y en quien no apostaron.
HHH ganando el Royal Rumble 2020
Los bookers se dieron cuenta del error tarde, con ese estadio silencioso mirando su combate con Chris Jericho, siendo que una hora antes habían dejando los pulmones en la grada por Rocky y Hulk Hogan. A HHH le duró un mes su posición de top face, cediendo precisamente ante Hulk Hogan y The Rock. Y no pasaron muchos meses antes de que tuvimos nuevamente a ese heel traicionero y despiadado. Hoy en día con Roman Reigns hay mucho debate sobre los proyectos fallidos de ace y es curioso que este caso pase tan desapercibido en la historia.
HHH (c) vs Booker T, World Heavyweight Championship, Wrestlemania XIX, 2003.
Supongamos que el World Heavyweight Championship fue reinstalado en Raw, siete meses atrás. Y que todo ese tiempo hay un heel que lo ha tenido casi completamente solo. Lo lógico es que si estamos en Wrestlemania ocurra un title change, se consolide una nueva estrella y Triple H sea apartado un tiempo de la órbita del título. Pero nada de eso ocurrió. Booker T apenas había tenido relevancia el 2002 y que de repente estuviera peleando en las grandes ligas se sentía extraño. Pese a todo, igual tuvo el apoyo del público durante el match y por lo visto habrían celebrado su victoria. Lo peor, es que después de rasguñar la gloria lo bajaron al midcard todo el resto del año.
Habrá quien podrá decir que Booker T no estaba a la altura de las circunstancias, pero eso no es excusa, el title change tenía que darse. Y si no confiaban en Booker, fácilmente podrían haberle dado el puesto a RVD, tipo que estaba muy over y que podría haber refrescado el main event de Raw. Hunter no perdería el título hasta seis meses después, tiempo que fue casi totalmente ocupado en una repulsiva rivalidad con Kevin Nash. No por nada le dicen el reinado del terror.
Randy Orton vs HHH (c), World Heavyweight Championship, Unforgiven 2004.
La rivalidad de Orton y HHH tuvo momentos para todos los gustos.
Orton en la cima del mundo. Acababa de terminar con el reinado de cinco meses de Benoit, solamente para perder al mes siguiente con Hunter. Hay quien critica la traición de Evolution y el consiguiente turn face de Randy. A mi ambos acontecimientos me parecieron comprensibles, ya que era lógico que HHH se pusiera celoso y que la gente le tomara simpatía a Orton por la situación. El match era justificable, el resultado no.
La gran storyline de Wrestlemania 21 era la del “a las sombras” Batista retando a su líder, por lo cual era lógico que eventualmente HHH volvería a ser campeón. Sin embargo, era muy distinto que recuperara en Royal Rumble a que lo hiciera en Unforgiven. En vez de 26 días Orton debió tener un reinado consistente de 4 – 5 meses. Además, luego de perder Hunter podría haber estado un tiempo alejado del título (por el que retó a lo largo del reinado de Benoit) mientras que Randy y el canadiense tenían una gran revancha . Pero no, Orton perdió y siguió perdiendo oportunidades a la vez de momentum.
Edge (c) vs Jeff Hardy vs Triple H vs The Undertaker vs Vladimir Koslov vs The Big Show, Elimination Chamber match, WWE Championship, No Way Out 2009
Jeff pasó un infierno para poder ser campeón mundial. Había una storyline de frustraciones luego de perder una y otra vez con el campeón Hunter, para que finalmente el título no lo ganase él sino que Edge. Todo esto hizo muy grande su coronación en Armageddon 2008 y lo ayudó a consolidarse como el luchador más over de la empresa. Lo normal era que a partir de ese momento Jeff retuviera al menos hasta Wrestlemania, ya que en esta época las luchas por los títulos mundiales eran siempre las más importantes del magno evento. Pero no, el reinado duró un mes y el luchador más over de la empresa terminó peleando en Wrestlemania con Matt Hardy.
Triple H en cambio, había tenido un reinado de siete meses y la transición le había dado el título a alguien más popular que él. Entonces era absolutamente ilógico que un mes antes de Wrestlemania lo recuperara y es más, para meterse en el Main Event. Encontramos un motivo destacado de porque ese evento estelar de la edición 25 tuvo tan poco ambiente.
Triple H vs Cm Punk, Night of Champions 2011.
Así es, Punk se había convertido en una estrella que atrajo un interés renovado para la empresa, pero a la que no cuidaron tanto como debieron. Parte del efecto se ve en que a lo largo de su reinado con el WWE Championship siguió a la sombra de John Cena. O también esta innecesaria derrota con alguien que ya no era un luchador activo. Quien diría que después sería normal ver al HHH viejo y semiretirado quedando bien con el talento over del momento.
HHH vs Brock Lesnar, Wrestlemania 29, 2013.
Nuevamente retornamos a ese Lesnar hinchado de credibilidad luego de romper la racha y preparado para la gran coronación de Roman Reigns en Wrestlemania 31. Pero la verdad no era necesario que Brock venciera a Undertaker para ser tan creíble. O al menos, no lo habría sido en caso de que hubiesen cuidado el status del ex-peleador de MMA. Lesnar con su estilo realista y la credibilidad de haber conquistado el título de UFC poco tenía que hacer para inspirar el aura de bestia invencible, solamente recibir un buen bookeo. Pero en vez de eso, le tocó una rivalidad con Hunter que ganó, pero con el veterano luciendo igual o superior en todos los combates.
Lo peor no fue la rivalidad en si, sino que el hecho de que Triple H ganó el encuentro de Wrestlemania. Se puede alegar que fue el match intermedio ya que Brock lo venció al mes siguiente, así como la estipulación de que si Hunter perdía se retiraba. Pero la verdad de las cosas, Extreme Rules o Summerslam son PPV chicos al lado de Wrestlemania y hay mucha gente que es el único show de pro-wrestling que ve en el año. Lo que vieron esos casuales fue a una gran estrella fresca y demoledora perdiendo con una leyenda cuyo tiempo había pasado.
Royal Rumble match, Royal Rumble 2016.
Este HHH y sus victorias qlas.
Contrario a muchos, no considero que acá Hunter se haya cegado como en otras ocasiones por la sed de gloria, en ascuas de ampliar su extenso palmarés. Me da la impresión de que realmente creía que potenciándose como heel podría poner lo suficientemente over a Reigns. Lo que arruinó todo fue su ego, esa creencia de que él podía salvar el día cuando claramente había alternativas mejores.
Si ganaba Lesnar era la posibilidad de hacer la revancha del Main Event de Wrestlemania 31 cuando aún era una papa caliente, mientras que si lo hacía Ambrose por fin podían consolidarlo como estelarista. Pero no, como es usual con Triple H, la cagaron.
Un combate sin historia que se anunció para darle algo más de brillo a la cartelera. Como opener del evento cumple bien, ya que prende al público y estos empiezan a corear por sus favoritos (excepto en la primera fila que estaban apagados).
Del match no hay muchas cosas destacadas, salvo un momento donde Triple H intercepta un salto de Cena y lo convierte en Powerbomb, o cuando convierte el AA en Pedigree en el último segundo.
Una vez más, el intento de abusar de los AA de Cena se hace presente, algo que siempre me ha parecido molesto del Cena Spotty de estos tiempos. No me esperaba un gran combate, solo se esperaba que despertaran al público árabe.
Valoración: 2 Jumbitos 3/4.
Por Shut.
Existe una creencia que entre mejor ambiente, mejor lucha es. Y entre peor resulta el entusiasmo de la grada, el combate es malo. Error.
Cualquiera que haya asistido a un house show sabe que lo que ofrecieron Cena y HHH es eso, un duelo digno de un evento no televisado. Tomas de fuerza, guiños del rival, un par de kickout para dar algo de emoción y listo.
Para lo que vino después, no estuvo mal, y el ambiente logró que se disfrutara por momentos. Pero en el balance final, está lejos de ser algo por recordar, como históricamente han sido los house show. Simplemente son emociones pasajeras.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Cedric Alexander (c) vs Kalisto, WWE Cruiserweight Championship.
Por Shut.
Hablaba de esa mitología respecto a los ambientes porque acá tenemos un match bastante cumplidor pero que no prendió nada. Y resulta injusto.
El campeón se vio bastante agresivo, en su mejor faceta, mientras Kalisto derrochaba talento gracias a sus vistosas movidas. El final también resulta bien entretenido, con Cedric revirtiendo un Salida del Sol con un Lumbar Check.
Claramente pueden dar algo más notable, siempre y cuando se definan mejor los roles. Eso les jugó en contra.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
The Bar vs Matt Hardy & Bray Wyatt, Raw Tag Team Championship.
Por Shut.
Lucha que perfectamente se podría haber dado en Raw. El resultado era tan predecible, que eso mató mis ganas. Los nuevos campeones deben mejorar ese finisher, que careció de potencia.
Valoración: 1 jumbito 3/4.
Jeff Hardy (c) vs Jinder Mahal, USA Championship.
Por Shut.
El peor combate de la noche, con un Mahal extrañamente perdido y un Jeff que no debería ser campeón a esta altura de su vida.
Valoración: 1 jumbito.
Bludgeon Brothers (c) vs The Usos, Smackdown Tag Team Championship.
Por Shut.
Estos cuatro pueden ofrecer algo mucho mejor, tienen calidad de sobra, lo demostraron en el pasado. Esto de hoy no me agrada.
Valoración: 1 jumbito 1/4.
Seth Rollins (c) vs Samoa Joe vs Finn Bálor vs The Miz, Intercontinental Championship.
Por Lone Wolf.
Combate cumplidor. El público bastante apagado por momentos, creo que su mejor reacción fue cuando salió Rollins. Por lo general los encuentros de escalera prenden harto al público pero este no fue el caso.
Cada uno aporta con algo al combate. Joe con su lado dominante a base de fuerza, Miz en su lado oportunista y Bálor y Rollins haciendo despliegue de su agilidad. Tiene sus spots destacados como el Coup de Grace sobre un Miz que estaba en la escalera o las fases de dominio de Joe. El final no me lo trago, una vez más queda cerca del título, y en vez de apurarse, Rollins sale de la nada y descuelga el título rápido. Un desenlace malo para un combate que se pudo plantear mejor y que tenía como objetivo encender más a los asistentes.
Valoración: 3 jumbitos.
Por Shut.
Lo mejor de la noche (lo que tampoco es decir mucho).
Es el enfrentamiento donde me hicieron creer que estaba viendo un PPV de ley y no un house show cualquiera. Vi agresividad, buenos spots y algo de drama. Joe es una bestia que si la empresa procura cuidar podrá tener un gran valor entre sus filas.
Muchos criticaron el final, sin embargo, a mi me encantó. Inteligente y que te deja la clara chance de un Rollins vs Bálor a un futuro. La cara de Finn sangrando mientras Seth le quita su gran oportunidad es notable.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
AJ Styles (c) vs Shinsuke Nakamura, WWE Championship.
Por Shut.
Con roles claros, esta rivalidad ha mejorado bastante. Nakamura de heel empieza a recuperar esa aura que tan famoso lo hizo.
Este combate iba bastante bien, con un gran inicio, un desarrollo medio flojo, pero con un trazo final muy divertido. Lo malo, el desenlace, el cual tira por la borda algo mejor que WM, pero tampoco tantoooooo.
En el tercer acto espero mucho más.
Valoración: 3 jumbitos 1/4.
Por Lone Wolf.
Calificado por muchos fans como dream match, Styles y Nakamura venían de entregarnos un combate bastante decepcionante en Wrestlemania 34. Tras un cambio importante en la personalidad de Nakamura y sus constantes golpes bajos sobre el campeón, obtenemos este match de revancha, con un aire más fresco y atractivo. El resultado, algo bastante entretenido.
Desde los primeros minutos se puede presenciar un buen ambiente, con gente apoyando más a AJ. El Fenomenal desde el inicio se muestra determinado a cobrárselas al japonés. Naka pronto toma la ventaja y empieza a con rodillazos y patadas en la cabeza, luciendo agresivo y desafiante. AJ reacciona por momentos con un Facebuster y Ushigorushi pero Naka de una patada vuelve a tomar el control. Tras esquivar un Kinshasa, Styles saca un Calf Crusher que no logra rendir a Naka. El Artista una vez más toma de nuevo ventaja con patadas. Allí es donde ambos sacan sus golpes rápidos mientras el público sigue apoyando a su favorito.
El campeón busca acabar todo con su Antebrazo fenomenal pero el Nipón esquiva el ataque quedando AJ cerca de atacar al árbitro, en lo que Naka aprovecha para lanzar un golpe bajo a Styles con posterior cuenta pero el campeón sobrevive. Shin busca el Kinshasa pero AJ lo recibe con un Forearm. Ambos se van a ringside y no pueden regresar al ring quedando en empate. No contento con el resultado, AJ ataca a Naka con Forearms y se retira para lo que significa, la continuación de esta rivalidad.
El combate es disfrutable, me gusta la labor de Naka con sus ataques a la cabeza de AJ y su papel de enloquecido lo plasma bien en el ring, AJ por su lado no desentona y sabe reaccionar de buena manera en los momentos precisos. Hubiese preferido que tuviera un ganador claro, pero al menos me quitaron el mal sabor de boca de Wrestlemania. Espero poder seguir viendo más de este Naka.
Valoracion: 3 jumbitos 3/4.
Undertaker vs Rusev, Casket Match.
Por Shut.
Esta estipulación es horrible, siempre lo ha sido. Por eso me sorprende que esto resulte mejor que esos bodrios de Taker vs Kamala o Taker vs Kama. Aunque bueno, ese “Hombre Muerto” valía callampa, mucho más que el actual.
Ahora el hombre está viejo y se nota, aún así supo sacar adelante la tarea. Rusev mostró algo de ofensiva, aunque su destino era claro.
Valoración: 2 jumbitos.
Brock Lesnar (c) vs Roman Reigns, Steel Cage, Universal Championship.
Por Shut.
Me tiene hasta la coronilla Brock Lesnar. Basta de que sea campeón. BASTA.
Me tiene podrido la fórmula llena de finishers y signatures moves de estos dos. BASTA. Son dos tipos muy talentosos que pueden dar algo mil veces mejor y no este festival de ciencia ficción barata.
Decepcionante rivalidad la que se han mandado en este 2018, un dolor de cabeza más que otra cosa. Lamentable.
Valoración: 1 jumbito 3/4.
Greatest Royal Rumble Match.
Por Rockstar.
En lo técnico uno de los peores Rumbles del siglo, la cantidad de botches es impresionante, se entiende que al ver más participantes aumenten los errores, pero no creo haya sido para nada digno lo que vimos hoy en cuanto a ejecución. Está bien, te terminas riendo, pero vamos, no olvidar que es un match de wrestling.
Haciendo caso omiso a la prolijidad en el combate, me ha parecido un Rumble con altibajos, bien elegidos los número 1 y 2, bastante agradecido de la performance de Bryan, pero no le hubiera dado el récord. El que no terminara ganando la batalla hace que vea que le quitaron esto a Rey de forma muy gratuita considerando que él si ganó su Rumble.
Acertada la participación de Angle, que con su status podría haber sido de las finalistas pero mejor que eso reforzó la parte baja del match. Fatal lo de Breeze y Fandango, ir tan lejos para luchar tan poco tiempo… sí, linda experiencia ir a Arabia, pero puedes ir en las vacaciones y lo pasarías mucho mejor, esperen un momento, verdad que los luchadores de WWE no tienen vacaciones, así conformémonos con que Breeze, Fandando, Kanellis y uno que otro por ahí lo pasó bien viendo camellos.
Gran presentación de Roderick Strong, fuerte con moves complejos muy bien aplicados, de lo mejor del show, vuelvo a destacar la participación de Bryan y todo iba bien hasta que entró el numero 50, incluso Shane ahí no me molestaba porque tenía contexto con ciertos rivales, pero hasta aquí llego con el análisis porque de verdad me quiero olvidar de los últimos 5 minutos de Rumble, más que nada de la precaria actuación de Jericho.
Unas líneas dedicadas para Lashley, paupérrima actuación, horrible, ahí quedó “El Superman Negro”, un lindo repaso a toda esa gente ignorante que cree que porque hizo algo en Bellator se supone debería remplazar a Lesnar. Brock será todo lo que quieras pero compararlo con Lashley en cualquier sentido es una estupidez. Espero que no luchen porque Lashley no merece enfrentar a Lesnar, ni siquiera considero que sea un combate que venda, Bobby debe ir a lo más por el IC o el USA y todos felices, no merece más, nunca lo mereció.
Volviendo al Rumble, algunas secuencias buenas, los típicos momentos del New Day, las clásicas alianzas, algunos encontrones interesantes pero bien promedio todo, Si Bryan no hubiese sido el n°1 estaríamos hablando probablemente de algo mucho peor.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Por Shut.
Me encanta la estipulación. Mi favorita, por lejos.
Este era mi principal motivo para ver este evento, y si bien se disfrutó por pasajes, no puedo negar que hacerla de 50 luchadores y sin un premio de real peso, careció de valor y emoción.
Buena performance de Bryan, para demostrar que el tipo está 100%. De todas formas no me gusta que se rompan récords sin algo de sustento detrás. No obstante, mejor que no haya ganado, así queda abierta la posibilidad que gane uno de verdad.
Braun era mi favorito, el tipo debía quitarse ese estigma de “correr solo para quedar segundo”. Necesitaba una buena victoria. Y si bien este Rumble es de papel confort corrugado, por lo menos tiene spotlight. Y harto, queramos o no.
Elias es un diamante en bruto, la empresa debe potenciarlo aún más. Lashley es un irresponsable tremendo, casi mata a Cass. “Pero que importa, ojalá sea campeón mundial jejejejeje”. De verdad no entiendo para qué regresó, no tiene nada interesante por ofrecer. Nada.
La actuación de Jericho fue lamentable, hacer viajar a Y2J para esto, no gracias.
Dejar fuera a Sami Zayn por su nacionalidad siria y por sus actos humanitarios con un país mutilado es de un asco tremendo. Como leí, uno se siente sucio viendo esto.
En fin, la lucha tuvo sus momentos llamativos (especialmente el reencuentro de Bryan con Strong), algunas sorpresas agradables, buenas eliminaciones y potenciando una rivalidad que a mi me está gustando, como la de Cass con el barbudo.
Valoración: 2 jumbitos.
Y si de jumbitos se trata, lo mejor de la noche.
Valoración: todos lo jumbitos del Maravillozooooo.
Kalisto, Lince Dorado & Gran Metalik vs Drew Gulak, TJP & Jack Gallagher.
Por Rafael Calderón.
Combate de exhibición para la división crucero que sólo sirvió para rellenar el Kick-off y para mostrar un poco las capacidades de los involucrados. Match divertido, algunos spots vistosos y victoria face. Lástima que WWE haga combates con estadios sin llenar, una falta de respeto hacia los wrestlers.
Valoración: 2 jumbitos.
The Revival vs The Club.
Por Rafael Calderón.
Combate interesante. The Revival es un tag con un potencial tremendo, y aquí sacaron a relucir varias de sus cualidades, siendo inteligentes con relevos rápidos, un limbwork bien trabajado a la pierna de Anderson, y astucia para llevarse una necesaria victoria tras la humillación sufrida en RAW (Gracias HHH). Ojalá vayan a un camino de cosas más importantes.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Bobby Roode (c) vs Mojo Rawley, USA Championship.
Por Rafael Calderón.
Lucha bastante meh.
Roode trabaja mejor como heel que como face, y Mojo es alguien bastante nulo in-ring y en este match se notó, siendo algo bastante soso. Es que incluso, el Glorious DDT fue el peor que le he visto a el Bobby en su paso por WWE.
Valoración: 1 jumbito.
Entramos a lo que importa:
AJ Styles (c) vs Kevin Owens & Sami Zayn, WWE Championship.
Por Cristóbal Meléndez Martin (Shut).
AJ Styles, por segunda vez, poniendo una lucha del prestigioso campeonato mundial de la WWE en el opener. Pero no, que tras Mahal vendrían tiempos mejores…
Fuera de ese detalle, no estuvo mal. La estipulación sin duda no era atractiva y la invitación resultaba compleja de asumir. Pero los tres sacaron la tarea adelante, con AJ recibiendo de buena forma los ataques de los heel, y con Sami y KO actuando muy bien en sus respectivos papeles. El final me pareció muy inteligente, porque mantiene todo el conflicto que se viene desarrollando en torno a “Kami”, los “carreadores” de SD Live.
Valoración: 3 jumbitos.
Por Rafael Calderón.
Sin ser un combate muy bueno, cumplió con lo que esperaba. KO y Sami empiezan de forma inteligente a hacer tags rápidos para cansar a AJ, y luego hacen un buen trabajo como heels atacando a Styles, aprovechando la estipulación. “El fenomenal” se defiende cada vez que ve la oportunidad, y aunque no veo que tenga mucha química con Owens, sí que tuvieron buenas secuencias y algunos falsos finales haciendo el guiño al SD pasado con victoria polémica de AJ para seguir con esta historia, la cual seguramente llevará a otro enfrentamiento.
Valoración: 3 jumbitos 1/4+.
The Usos (c) vs Chad Gable & Shelton Benjamin, Smackdown Tag Team Championship.
Por Rafael Calderón.
La primera caída es buena, y es que al principio pensé que se irían por el limbwork a la pierna de Jimmy, pero decidieron casi que hacer un combate a una caída. Buena performance de los cuatro, jugando con cosas de sus luchas anteriores y teniendo un ritmo alto con buenos nerfalls y culminando con The Usos llevándose la primera caída.
La segunda empezaba bien con Gable y Benjamin deshaciéndose de uno de los Usos para asegurarse la victoria, pero de la nada Shelton es pineado por el otro Uso (a aprenderse los nombres pues Rafa) y deja el 2-0 con un decepcionante final para un combate que pudo dar más juego con la estipulación, y que, supongo, alejará a Gable y Benjamin de la órbita titular para dar paso a The Bludgeon Brothers.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
30-Man Royal Rumble Match.
Por Cristóbal Meléndez Martin (Shut).
Si bien resulta bastante fácil decir “el mejor Rumble de la década“, porque las versiones anteriores son francamente horribles, estamos de forma clara ante un gran match, que recupera esa magia de sus mejores versiones y puede pelear palmo a palmo con varios clásicos.
A pesar de mi enojo por la decisión de la empresa de colocarlo en un lugar tan corneta de la cartelera, eso se disipa con el resultado final. Es que tiene muy buenos momentos, de principio a fin. Lo de Slater resulta genial, caló en el público y para el espectador es un catalizador. Las sorpresas de Andrade y Adam Cole fueron tremendas, demostrando que son dos piezas importantes de NXT. A eso le sumas lo de Hurricane y esa nueva cuota de humor siempre necesaria; y por supuesto a la hermosa aparición de Rey Mysterio, uno de los más grandes de la historia (aunque te duela, payaso vestido de taco de la primera fila).
Una de las cosas que más echaba de menos del Rumble eran esos momentos que te dejaban la batalla, los cuales de alguna forma, lograban trascender. Y acá uno puede encontrar algunos, como Reigns eliminando a Rollins o ese careo generacional entre Roman, Bálor y Nakamura con Orton, Cena y Mysterio (cuya aparición sorpresa se cuela dentro de las mejores de los Rumble matches). También tiene una genial respuesta del público, con buenos pops a tipos como Elias o Rusev, lo cual abre la esperanza de verlos en cosas importantes. Lo de New Day también resulta entretenido, ver a Sheamus eliminado de esa forma, la gran performance de Bálor, etc. Son muchas las virtudes que tiene.
No obstante, tienes cosas negativas, pocas, pero las tiene. Lo de Ziggler señores, con el debido respeto, es una “mariconada”, un portazo en la cara a fanáticos y los tipos de las casas de apuestas. “¿Sueñan con una gran actuación de Dolph? Pues les daremos todo lo contrario”, nos dijo Vince de forma claramente personal y desperdiciando una historia de redención que podría ser magistral.
En fin, fuera de eso, es un gran Rumble. Y sobre Nakamura, si bien no era mi candidato y creo que habían mejores opciones, lo prefería por sobre Cena o Reigns, o cualquier otro part-timer. El tipo genera reacción y es una figura comerciable, pero sobre todo, es alguien FRESCO, de la camada NUEVA del main roster. Ahora tendrá adelante su mayor prueba de fuego y confío en que la pasará. Es que debe pasarla.
Valoración: 3 jumbitos 3/4.
Por Rafael Calderón.
Gran Rumble, de lo mejor de esta década y el combate de la noche.
En la mayoría del match se hicieron bien las cosas, y lo mejor de todo, no hubo apariciones de part-timers (salvo Cena, que no está mal), ni de viejas leyendas para opacar al futuro de la compañía. Tuvimos varias actuaciones destacadas del talento joven (como la de Bálor, Rusev o Elias), regresos o apariciones sorpresas (como la de Rey <3, Andrade o Adam Cole) y varios buenos momentos (El careo 3 vs 3 del futuro contra el pasado). Todos esos ingredientes hacen de este un buen match en conjunto.
No obstante, pues algunas cosas como la eliminación de Corbin, el ya aburrido spot de Kofi, el trolleo de Ziggler y Roman siendo utilizado nuevamente para que el ganador se lleve una buena ovación, empañan un poco este buen Rumble. El ganador por fin es alguien a consolidar y es que Nakamura representa parte de la nueva sangre de WWE, y es que si bien puede representar mucho premio para el japonés, quizás sea el espaldarazo que necesitaba para dar su mejor versión en la empresa.
Valoración: 3 jumbitos 3/4+.
Seth Rollins & Jason Jordan (c) vs Sheamus & Cesaro, RAW Tag Team Championship.
Por Rafael Calderón.
Lucha un tanto decepcionante en el que The Bar realizan una buena labor como heelsy en el que se sigue avanzando en los problemas entre Jordan y Rollins. Acá tiene dos problemas, en primer lugar, el público está muerto tras el Rumble masculino y eso es un error de posicionamiento en la cartelera, y el segundo inconveniente es que el spot por el cual Jason no puede participar en el match me parece un poco soso y creo que para hacerlo más creíble debió haber sido algo más brutal e impactante. La victoria de The Bar, me deja muchas dudas de cara al futuro de la división pues no hay más tags creíbles y Rollins y Jordan se separarán pronto, por lo que tendrán que potenciar a alguna pareja (Titus Worldwide no por favor).
Valoración: 2 jumbitos 1/4.
Brock Lesnar (c) vs Kane vs Braun Strowman, WWE Universal Championship.
Por Rafael Calderón.
Horrible, ritmo demasiado lento, algunos spots bastante predecibles, y un enfrentamiento decepcionante en el que hay pocas cosas a resaltar, salvo un ligero pique entre Braun y Brock, tras un rodillazo a la cara de Lesnar al cual The Beast respondió con un derechazo tremendo a la cara de Strowman. Lo demás, muy predecible victoria de Lesnar con pin a Kane para “proteger” a Braun e ir de cara al tan rumoreado Lesnar vs Reigns en Wrestlemania.
Valoración: 1 jumbito y medio.
30-Women Royal Rumble Match.
Por Rafael Calderón.
No fue tan malo como esperaba, pero creo que tampoco llega a ser decente, y principalmente es por temas de bookeo y porque en si pocas tienen un buen nivel para dar algo notable. Para ser breve, no me gusta que viejas “leyendas” tengan más protagonismo que gente del roster actual, eso es dejar en claro que el pasado importa más que el presente, aunque las de ahora no tengan un gran nivel ni status. Las finalistas debieron ser otras para generar más expectativa, las Bellas siendo finalistas estando semi-retiradas es algo inaceptable, poniendo a Sasha, Nia y Becky hacías el final más impredecible y mucho más llamativo. El bookeo de Becky, si bien no fue tan terrible como esperaba, sigue siendo malo, siendo eliminada a mitad de combate y demostrando que ni le tienen confianza, ni parece que vaya a hacer algo más en su carrera en WWE que poner over a las demás así sean peores que ella en todo. Pero no todo fue malo, algunas sorpresas agradables (Lita), no hubo grandes botches y gano la indicada.
Valoración: 2 jumbitos.
Por Nacho Meñique.
Desde el momento en que promocionaron este combate, las condiciones me hicieron pensar que saldría algo pésimo. Así que escribí un artículo expresando mi descontento con la idea, el cual tuvo una cariñosa respuesta en forma de otro artículo por parte de Manuel Saavedra. Lamentablemente, el Rumble confirmó mis miedos e incluso puso en relieve otros aspectos desagradables que no se me vinieron a la mente en un primer momento.
En primer lugar, el nivel in-ring fue bajo mirando el conjunto. Ya era algo que se veía venir con gente como Liv Morgan participando. Al respecto hay ofensivas como la de Lana que me recordaron más a un match femenino del 2008 que uno del 2018. Pero fue peor aún, casi todas (sino todas) las part-times que llegaron por sorpresa venían saliendo del retiro y además la mayoría (originarias de malas épocas de divisiones femeninas) no eran tampoco lumbreras en el ring en su mejor momento. Todo ello sin desmerecer que las buenas luchadoras hicieron lo que pudieron, además de que el duelo final Asuka y Nikki es bastante interesante.
Un segundo punto que toqué en el artículo es que la baja estatura de las mujeres iba a hacer difíciles y poco realistas las eliminaciones, y vaya que fue cierto. Hubo luchadoras que como por casualidad fueron sorprendidas montadas en la segunda cuerda y otras que tuvieron que saltar para que su compañera la hiciera pasar sobre la tercera cuerda. De hecho, que pasara lo último con Asuka eliminando a Ember Moon refleja que fue un problema transversal e independiente a la calidad in-ring. Aunque sin duda, la que peor recuerdo es la de Lita tratando de bajar las cuerdas para sorprender a Tamina corriendo, quien da el el salto de su vida.
En tercer lugar dije que el premio iba a ser insignificante y aunque aún no se celebra Wrestlemania, creo que la ganadora del Rumble no tendrá un lugar importante en la cartelera (entre los tres platos fuertes). La baja prioridad de las divisiones femeninas en el magno evento es una realidad, ya se vio en Wrestlemania 32 aún con medio roster lesionado. Ahora es peor, ya que la ganadora Asuka fue opacada por la aparición de Ronda Rousey quien da a entender su participación en Wrestlemania 34. Dada su condición de draw natural, es evidente que su combate va a ser más importante que el de Asuka retando a Alexa o Charlotte.
En ese artículo evite darle énfasis a la ineptitud creativa que ha dañado por años varios combates de la división, ya que nunca se sabe cuando los bookers pueden sorprender para bien. Lamentablemente, el Rumble no contó una gran storytelling tuvo muchas eliminaciones sin un sentido práctico. Por ejemplo, en los shows semanales previos al PPV vendieron a los stables heels Absolution y The Riott Squad. Pero después vemos que apenas hubo momentos con dos miembros de cada stable en el ring. Para el único momento en que la storytelling mejora es la recta final con el dominio de Nia y luego de las hermanas Bella.
Pero aún más, algo que dañó mucho el combate en el bookeo fue el exceso de veteranas. Te quieren vender Women´s Revolution y una división más enfocada en los combates, solo para ver como llenan el ring de todas esas luchadoras de la época oscura. Es comprensible que metan a Nikki, Lita y Trish por ser icónicas, pero es que en total fueron 11 las luchadoras que no estaban compitiendo de manera regular. Lo peor de todo, es que la mitad del tiempo el público no reaccionó. Después de todo, hubo años muy malos en que nadie le prestaba atención a la división.
A modo de conclusión, fue mediocre y creo que cualquier punto adicional por lo “histórico” solamente sirve para disfrazar su baja calidad. Si vamos a tomarnos en serio a las chicas del main roster, hay que exigirle lo mismo que a los hombres, de otro modo solamente nos engañamos a nosotros mismos. De hecho basta con mirar lo bien que funciona la división femenina de NXT pidiendo ese nivel (de donde por cierto deberían haber sacado más gente, en vez de algunas de las veteranas). Igual el combate tiene uno que otro buen momento como el careo de Nia y Beth Phoenix o el duelo final, de otro modo habría considerado la valoración DUD.
Valoración: 1 jumbito 3/4.
Por Cristóbal Meléndez Martin (Shut).
No concuerdo con Nacho, y me parece cae en una exageración. De partida, esto es Royal Rumble, donde apariciones sorpresas siempre van a haber. Más aún cuando tu roster es muy limitado. Si bien momentos como el de Kelly Kelly o Jacqueline restan, tampoco ensucia el global de un Rumble muy entretenido.
La estipulación es esa, una invitación a disfrutar, a pasarla bien, no a encontrar una dosis de genialidad en el ring. Acá se exige un buen bookeo y grandes momentos. Y lo tuvo. El careo de Nia con Beth Phoenix, Becky eliminando a Lita, Trish con Mickie, Asuka con Ember Moon, y las Bella dando esa sensación de “enchufe” que resultó genial para el triunfo de la japonesa. No pidamos que no hayan botches o eliminaciones feas, históricamente con los hombres ha pasado y nunca se criticó con dureza. Es a lo que te expone esta estipulación, esa de ser uno de los caos más entretenidos del pro-wrestling.
Si bien hay detalles malos, como la eliminación de Becky o la estupidez de no hacer un careo Lita con Trish, las dos figuras más icónicas de la división; tiene la cuota justa de humor (grande doña Vicky), dramatismo (Sasha eliminando a Bayley o la forma en cómo se despacha a Nia) y unos regresos muy a la altura, como los de Molly Holly, Michelle McCool y Beth. Si salían Peyton Royce y Nikki Cross se coronaba como una experiencia redonda.
En fin, lo pasé muy bien viéndolo y eso lo agradezco por sobre todas las cosas. Para alguien que veía los Rumble en una tele que debía cambiar de canal con un alicate, resulta maravilloso esos guiños a la nostalgia. Y es que este Rumble en particular te invitaba a eso, contexto que mis compañeros no reflexionan del todo. Es el primero de la historia y con un roster limitado. Se acepta y se entiende la aparición de iconos. Para el otro año, la exigencia será otra, la de consolidar más a tu elenco y no depender tanto del recuerdo.
Y bueno, hoy es Royal Rumble, mi PPV favorito de WWE. A pesar del miedo existente a que WWE la vuelva a cagar, siempre es grato verse estos combates. Es un ejercicio hasta obligatorio, porque estamos en presencia de la estipulación más atractiva de la empresa.
Obviamente, con algunos puedes sufrir. Por eso, acá hacemos nuestro último especial antes del evento con los mejores y peores Royal Rumble Match de la historia.
Los mejores
5. Royal Rumble Match 1997.
Grata sorpresa. Siempre trato de esquivar los Rumble noventeros, me generan más rechazo que sensaciones positivas. Pero acá me pasó todo lo contrario y creo es justo que se meta en mi ranking personal. La construcción de Austin acá es brutal. Entra en quinto lugar y en sus 45 minutos dentro de la batalla va eliminando de forma genial a gran parte de los participantes, como a Owen Hart o Marc Mero. Llega un momento que queda solo y entran Savio Vega (rivalidad interesante del 96) y luego tras ser eliminado el puertoriqueño lo hace Jesse James, también para la casa. Y ahí entra Bret, en esos momentos que me encantan del Rumble. Los careo uno a uno entre grandes luchadores o de aquellos que vengan con una historia detrás.
El final también es atractivo, con figuras como Mankind, Vader y Undertaker llegando a los compases finales. Tras ser eliminado por Bret, Austin se percata que los árbitros no vieron su eliminación así que aprovecha de entrar para despachar a los que quedaban, en especial a Hart, quien creía tener la victoria en su bolsillo. Extraordinario desenlace.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
4. Royal Rumble Match 2005.
Vince debería ver esta lucha, juntar a sus bookers, y entender que este es el camino para potenciar a tus prospectos. Fuera de esos momentos típicos “Made WWE” como la humillación a Daniel Puder o que tanto wrestlers de Raw y SD se unan para machacar a Mohamed Hassan por el simple hecho de ser árabe; este Rumble pasará a la historia por la genial forma en cómo potenciaron a Cena y Batista, dos figuras que serían relevante en el futuro de la compañía.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
3. Royal Rumble Match 2007.
¿Tiene este Rumble el mejor final que se ha visto? A mi entender, sí. El desenlace entre HBK y Taker es maravilloso, evocando nostalgia pero también soñando con el horizonte. El hombre muerto comienza a encontrar su mejor versión como wrestler, y Michaels retoma ese peak que alguna vez lo hizo brillar.
A ese escenario se suma que hace muchos años que ninguno era campeón mundial y no tenían la chance de luchar por el título en Wrestlemania. Entonces, sin dudas lo que ocurre en San Antonio es mágico.
Además de la conclusión del match, el desarrollo también es interesante, con el factor WWE/ECW haciendo su debut como marca, o con Edge y Orton en una muy buena performance heel.
Valoración: 3 jumbitos 3/4.
2. Royal Rumble Match 2004.
Este match es casi perfecto, una de las mejores construcciones que he visto. No deja nada al azar y se hace demasiado entretenido. Está repleto de grandes momentos, cosa que siempre debe estar en este tipo de estipulación. El ¡gong! del Undertaker para amedrentar a Kane, Foley ingresando para eliminar a Orton, y Lesnar cagándose a Goldberg son situaciones impresionantes.
La forma en cómo gana Benoit también es excelente, y si bien es cierto que cuesta resaltar su figura por todo lo que ya sabemos, su actuación es buenísima. Lindos tiempos cuando ganaba quién salía de los primeros. Y hermoso recuerdo también ver al Big Show cerca de la gloria, una vez más…
Valoración: 4 jumbitos 1/4+.
1. Royal Rumble Match 2001.
El mejor, no hay duda de aquello. Si me lo quiere discutir, prepárese, que yo y mi furgón iremos por ti. Más en serio, es el mejor Rumble match que he visto.
Como muchos saben, soy un gran seguidor/defensor de Kane, así que estoy enamorado de la performance que se saca acá. A eso le sumas que la parte “violenta” del Rumble es bastante divertida y distinta a lo que se venía entregando. “The Big Red Monster Machine” se los despacha a todos, incluido a la mentira de Tazz. Cuando queda solo en el cuadrilátero aparece The Rock. ¡Estos son los momentos que hay que hacer, carajo! Es como que Bálor limpie la casa, quede solo, y aparezca Nakamura. Esa la es forma de crear situaciones que impacten a la gente.
La unión de “Los Hermanos de la Destrucción” más la llegada de Stone Cold dejan compases maravillosos. Buen aporte también el ataque de HHH a Austin, situación que le entregó más dramatismo al final, que es muy bueno e intenso.
Gran Rumble, ¡sí señor!
Valoración: 4 jumbitos y medio.
Los peores
5. Royal Rumble Match 1998.
https://www.youtube.com/watch?v=D2uDr9pR9ic
Me costó elegir la quinta posición, más aún cuando esta lucha la recordaba para bien. No obstante, vista de nuevo, se hace merecedora de entrar. Es demasiada insulsa y poco atractiva, perdiendo esa buena construcción que tuvo la del 97. Acá Austin no brilla tanto y su victoria se hace tan evidente que se pierde ese factor sorpresa siempre necesario para estos espectáculos. Ni Foley entrando con sus tres personajes la salvan.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
4. Royal Rumble Match 2012.
https://www.youtube.com/watch?v=EC8n2mLWmro
Así bien en frío, menos mal que Chris Jericho no ganó este Rumble, porque puta que es ahí no más pues. Ya viendo que participan gente como Justin Gabriel, Primo y Épico, uno de los Usos cuando aún no era nadie y Ricardo Rodríguez, uno ya sabe lo que viene. El duelo de la cobra versus Mr. Socko es divertido pero no es para un combate de estas características, seriedad ante todo. Michael Cole po wn, impresionante.
Sin embargo, y por lo cual no aparece más arriba dentro de lo peor, es el duelo final entre Y2J y Sheamus, el cual es muy entretenido.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
3. Royal Rumble Match 2011.
A muchos nos llamó la atención la idea de un Rumble de 40 hombres. Que equivocados estábamos…
New Nexus dominando gran parte del combate para que aparezca Cena y se los despache de forma muy simple es lamentable, pero más aún cuando aparece Hornswoggle y junto al ace de la compañía empiezan a eliminar a varios wrestlers. Nefasto.
Salvo la aparición de Booker T y la de Diesel (aunque cualquier ser humano sensato no se alegraría por ver a ese paquete), carece de sorpresa y dinamismo. ¡Y eso que eran 40 plazas! El final si bien resulta gracioso, no deja de ser muy inferior a muchos Rumble matches. Además la victoria de Del Río no tuvo ninguna importancia, retando al WHC en el opener de WM. Citando a Rockstar: “Una punguería”.
Valoración: 2 jumbitos.
2. Royal Rumble Match 1999
El año 99, cuando WWE empieza a dejar a atrás a WCW y se consolida como un muy exitoso producto, debe ser el peor en materia in-ring y también en creatividad. Y este Rumble no se escapa.
Bien malo es, sinceridad ante todo. Gira exclusivamente en torno a la rivalidad Austin/Vince por lo que el resto de luchadores participantes son meros rellenos. Ritmo soporífero, nulo momento impactante y poca acción llamativa es lo que dejó este cornetazo ideal para dormir.
Valoración: 1 jumbito, con cuea.
1. Royal Rumble Match 2015
https://www.youtube.com/watch?v=y6F27MP61Xc
La peor huea de la historia. Infumable. Un disparate. Una reverenda mierda.
Todo está mal con este Rumble. De partida, lo que le hacen a Daniel Bryan. Es como en que en el 2001 hubieran eliminado a Austin de la nada en medio del combate. Nuestro barbudo favorito estaba demasiado over y las expectativas con una gran actuación o su triunfo eran muy altas. Redimirse después de tener que abandonar el campeonato mundial repercutió fuerte en la grada, y porque la propia WWE te creó esas esperanzas. ¿Y me lo eliminas así de forma tan corneta? Horrible.
Pero eso no es todo, porque la participación de otros luchadores que tenían la simpatía del público fue un asco. Ambrose y Ziggler llegaban con mucha reacción para finalmente ser eliminados por los talentos jóvenes Big Show y Kane. Incluso Wyatt, que llevaba una gran actuación, fue eliminado como un vil saco de papas.
Reigns termina pagando los platos de un bookeo terrible, de ese que corona a la edición 2015 como el peor Rumble de la historia.
Royal Rumble es significado de Batalla real de 30 hombres. Es probablemente, el gimmick match más importante que tiene WWE. Es el momento donde se da el puntapié inicial al famoso “Road to Wrestlemania”. Sin embargo, en este PPV también se han dado grandes combates por los campeonatos mundiales de WWE. Algunos son recordados y otros olvidados, pero siempre quedan a la sombra de la Batalla real. Por eso, este artículo tiene como fin recordar 5 grandes combates por los campeonatos mundiales.
5.- Brock Lesnar (c) vs John Cena vs Seth Rollins, Royal Rumble 2015.
Es una de las triples amenazas más entretenidas que se ha visto en los últimos tiempos en WWE.
Lesnar estaba en uno de los puntos más altos de su reinado, mientras que Cena y Rollins se encontraban en una rivalidad aparte, debido a la historia de la Autoridad y toda esa mierda que es mejor olvidar. Para hacerla corta: Cena ganó su oportunidad para enfrentar a Lesnar en el PPV “Hell in a Cell”, mientras que Rollins fue agregado a esta lucha por traer de vuelta a “La Autoridad” (gracias, ctm).
La lucha se plantea de una manera simple: Lesnar como la bestia invencible; Cena como el chico que pelea hasta el final y Rollins como el heel cobarde y oportunista. En ese sentido, Brock es el gran dominador en el inicio del combate, en el cual ejecuta sus variantes de suplex para tomar las riendas del match. Esto cambia durante el transcurso de la lucha, debido a que Rollins y Cena empiezan a llevar el peso durante un tramo de la lucha, todo esto para poder contrarrestar la fuerza que representa “The Beast”.
Al final del enfrentamiento, Lesnar vuelve a tomar el dominio, luego de un comeback bastante orgánico (después de un spot en la mesa) y que no se siente para nada anticlimático, cubriendo a Rollins para mantener el campeonato mundial de WWE.
Si bien es cierto que la lucha fue entretenida, creo que en varios lapsos del match se “fueron a lo fácil”, es decir, realizar un festival de finishers (4 a 5 AA, 2 a 3 Curb Stomp, 3 a 4 F5) y no vendieron muy bien el daño ocasionado (específicamente Rollins).
Cabe destacar, el buen spot provocado por Rollins sobre la mesa en la que estaba tendido Lesnar. Este hecho significo que la mayoría de la ICW se enamorara de Seth.
Para concluir, es una lucha que es bastante entretenida y disfrutable, aunque tiene ciertos detalles que le restan.
Valoración: 4 jumbitos.
4.- Mankind (c) vs The Rock, I Quit Match. Royal Rumble 1999.
Durante estos años que he visto wrestling, he aprendido que uno de los factores más importantes de este negocio, es mostrar o contar una historia entre los rivales. Esta lucha, sin duda alguna, cumple con este factor. Probablemente, es una de los combates más crudos en la historia de WWE, debido al desarrollo que se da.
Mankind y The Rock estaban involucrados en una de las rivalidades más importantes de la Attitude Era. The Rock era el heel cobarde, apoyado por The Corporation, pero que también podía ser despiadado cuando se daba la posibilidad (como en esta lucha). Mankind era el campeón underdog, el que tuvo que recorrer un camino arduo para llegar a ganar el título. Obviamente, no dejaría que su reinado terminara de una manera pronta y lo defendería hasta exponer su vida (tanto en kayfabe como en la realidad).
Mankind, como queda demostrado en toda su carrera, debe ser uno de los luchadores más resistentes que ha pertenecido a WWE y propuso una estipulación nunca antes vista. Esta consiste en que uno de los dos debía decir “I Quit” para que terminara el enfrentamiento.
La lucha es un buen brawl y que se encuentra bien armado, en el que desde el primer momento se reflejan las personalidades de los contrincantes. La acción no para en ningún momento. Ambos se dan con todo. Esto incluye golpes con diversos artefactos (escaleras, campana, micrófonos, etc), mesas rotas. Sin embargo, el suceso en que cambia el curso del enfrentamiento, es en el que The Rock y Mankind suben a la grada del público y este último es empujado por el “Corporate Champion” hacia el sistema de electricidad. Luego de eso, The Rock empieza a dominar la lucha y esposa las manos de Mankind, dejándolo con poca capacidad para hacer daño al “Great One”. Desde ese momento, viene lo brutal: Siete golpes a la cabeza con el esquinero y 11 silletazos a la cabeza de Mick Foley. Luego del ultimo silletazo, The Rock acerca el micrófono a Foley, en el cual se escucha la frase “I Quit” (en realidad, son voces grabadas). Con esto, The Rock recupera el campeonato, pero deja en claro que Mankind nunca se rindió.
En fin. Un brawl entretenido y a la vez, brutal. Queda demostrado lo capaz que podía ser The Rock como heel despiadado y la gran resistencia que tenía Mick Foley al recibir esos silletazos.
Valoración: 4 jumbitos.
3.- Kurt Angle vs Chris Benoit, Royal Rumble 2003.
Mientras el campeón y el contrincante de la marca roja daban una lucha corneta (la cual abarca Carlitos en su artículo: https://dosdossolodos.com/2018/01/27/royal-rumble-2003/, los de la marca azul daban uno delos mejores matches del nefasto 2003).
Benoit venció a The Big Show para ser el contrincante número uno al WWE Title. Cabe recordar que “The Rabid Wolverine” conocía muy bien al “Campeón Olímpico”. Se enfrentaron en dos WM consecutivos y habían sido los primeros campeones en pareja de SD. Acá el canadiense tenía la posibilidad de ganar el título mundial, algo que no había logrado en sus tres años en la empresa.
Al empezar la lucha, expulsan al Team Angle del ringside (para evitar las intervenciones). Angle la tenía algo más difícil. Benoit de manera rápida, busca atacarlo con headlock y un intento fallido de Sharpshooter, ya que Angle logra escapar. Benoit sigue con la fórmula de buscar un triunfo rápido (algo que en la mayoría de las luchas debería ocurrir). El olímpico lanza a Benoit en contra del esquinero, logrando dañar uno de los hombros de su rival. Angle empieza a atacar la respectiva zona, a través de golpes y un suplex. Sin embargo, Benoit logra recuperarse y le aplica una serie de chops y diversos golpes al cuello y al torso, pero Angle muestra la resistencia necesaria.
Un spot para destacar, es el DDT que aplica Benoit en el borde del ring, pero al buscar el conteo, no logra ganar. Para seguir su dominio, busca el “Diving Headbutt”, pero Kurt logra zafarse de la situación. Posteriormente, Angle busca el “Angle Slam”, el canadiense lo evita y conecta el “Sharpshooter” en la tercera oportunidad. Angle otra vez logra salir de la situación. Benoit realiza un “Back Suplex” aunque su rival muestra resistencia y realiza un “Belly to Belly Suplex”. Angle empieza a dominar a Benoit, llevando la lucha a ras de la lona con algunas llaves de sumisión, pero Chris revierte con un “Arm drag”. Sin embargo, Angle continua con su ofensiva, aplicando otro “Belly to Belly Suplex” y otro “Back Suplex”. Intenta lograr la cuenta de 3, pero no lo logra. Sigue la lucha a ras de la lona, aunque Benoit logra ponerse de pie y ataca al “Olympic Hero” con un Running Clothesline. Al agarrar confianza, vuelve a atacar a Angle a base de chops y 2 “German Suplex”, Angle revierte y aplica otro “German Suplex” y para finalizar la secuencia, Benoit aplica un último “German Suplex”. Obviamente, ambos buscan dañar la parte alta de la espalda y la nuca (ambos habían pasado por lesiones en el cuello).
Nuevamente, Benoit intenta conectar el “Diving Headbutt”, pero Angle es más rápido y logra conectar otro “Belly to Belly Suplex” desde el esquinero, pero solo logra un nearfall. Kurt busca nuevamente el Angle Slam, pero el ex “Pegasus Kid” logra conectar el “Clipper Crossface” y posteriormente, el “Anckle Lock”. Para pesar de Benoit, Angle resiste y revierte la situación en un “Angle Lock”. Nuevamente, el canadiense convierte esta situación a su favor y realiza otras dos veces vez la “Crossface”. Angle está a punto de rendirse, pero transforma la Crossface en un “Angle Slam”. Ambos contrincantes se enfrascan en un lapso en que ambos vuelven a ejecutar “German suplex”, la cual sale mejor parado Benoit. Es la oportunidad de “The Rabid Wolverine” y por tercera vez busca el “Diving Headbutt” y por fin conecta, pero no logra la cuenta de 3. Angle muestra resistencia, golpeando a Benoit con el esquinero, conectando un “Angle Slam” con su rival que se logra zafar de la cuenta . El campeón mundial se encuentra en mejor posición, pero Benoit es más astuto y aplica otra vez la Crossface. Sin embargo, Angle por 12312412 vez la revierte en Angle Lock, la cual intenta romper Benoit en 3 o 4 ocasiones, pero finalmente no lo logra y termina sucumbiendo ante la llave de rendición.
En los compases finales de este match, se llena de dramatismo y nervios. Benoit queda muy bien parado en este combate, siempre protegido y Angle queda muy potente como campeón mundial.
Valoración: 4 jumbitos y medio.
2.- Triple H (c) vs Cactus Jack, Street Fight Match, Royal Rumble 2000.
Foley hacía su “regreso” a WWE luego de ser despedido (kayfabe) al perder un match vs The Rock, su ex compañero de equipo. Obviamente, vuelve a cobrar venganza con el causante de aquello: Triple H. Sin embargo, no regresa con cualquier personaje, sino que con el más despiadado, sádico y violento que tiene: Cactus Jack (vean su regreso en SD, es muy bueno). “The Game” sabe que no es lo mismo enfrentarse a Cactus Jack, ya que tiene malos recuerdos del año 1997.
La lucha es un brawl bastante intenso, al igual que su rivalidad. Gracias a esto último, la acción no se demora en llegar. En los primeros compases, el match se desarrolla en el ringside. Una parte que debo destacar de este periodo, es un golpe con la campana de HHH a la cabeza de Cactus, el cual resiste. Luego de esto, HHH agarra una silla e invita a Cactus Jack a volver al ring. Este accede y recibe un tremendo silletazo (destaco esto, ya que aquí se puede ver que Cactus Jack no tiene miedo al dolor, demostrando muy bien en que consiste su alter ego), pero vuelve a su estado normal y ataca a Hunter con una Leg Drop, con la ayuda de una silla.
La acción vuelve al ringside, en la cual luchan entre el público y se apoyan en diversos elementos como tachos de basuras y el escalón metálico. Luego de esto, Cactus saca debajo del ring su famoso bate con púas, pero “The Game” lo esquiva y logra hacerse con el “contraataque”, utilizando el bate que quería utilizar Foley, golpeándolo en diversas partes del cuerpo. Luego de una pequeña distracción de HHH, Cactus Jack utiliza el bate para golpear las partes nobles del ñato y Hebner saca del ring el bate. Al realizar esto, no se percata del DDT que aplico Foley y de la búsqueda del pinfall de este. Foley busca nuevamente el bate de púas, golpeando a Hugo Savinovich para obtenerlo. Finalmente, logra conectar el bate con el rostro de Hunter, propinándole varios golpes y así, mostrando su lado más violento.
Sin embargo, “El asesino cerebral” revierte la situación, llevando la acción al ringside (por tercera vez). En esta oportunidad, vuelven a utilizar elementos como escalones metálicos y las mesas de comentaristas para poder debilitar al contrincante. Durante este lapso, HHH consigue unas esposas (guiño a su lucha con The Rock) para poder vencer a Foley, aunque este mostró resistencia. El dominio de HHH se mantuvo hasta una intervención del “People’s Champ”, el cual propinó un “chair shot” al futuro esposo de Steph. Cactus, gracias a esto, vuelve a dominar la lucha y utiliza sus famosas tachuelas. Lamentablemente, Foley no pudo utilizar esto para su beneficio y HHH lo derrotó al segundo “Pedigree” sobre las tachuelas.
Debo destacar el rol de ambos luchadores. Foley como un wrestler sádico es amor y HHH en esa época estaba en su mejor momento. También quiero resaltar las expresiones faciales de ambos luchadores, especialmente las de Cactus Jack. Con ellas, uno puede comprar otro alter ego de la “Leyenda Hardcore”.
Valoración: 4 jumbitos y medio+.
1.- John Cena (c) vs Umaga, Last Man Standing match, Royal Rumble 2007.
Royal Rumble 2007 fue el escenario de una de las luchas con más morbo del año, debido a que Umaga era una bestia que se encontraba invicto desde su debut en el 2006, hasta antes de luchar vs Cena en New Year’s Revolution, en el cual perdió por “roll up”. En esta lucha, buscaba venganza y obviamente, el campeonato. John, al no poder derrotar de manera tan clara al “Samoan Bulldozer”, sabía que enfrentarse en un Last Man Standing Match sería un reto aún más difícil. Durante los Raw que precedieron a este match, hubo buenos enfrentamientos y brawls en los shows semanales. En el último de ellos, Cena sale vendado en su torso, teniendo un desafío aún más difícil de enfrentar.
Gracias a este buen build up, las expectativas eran altas y no defraudaron.
Cena busca desde un inicio destrozar a Umaga, pero empieza con dificultades, ya que el retador ataca la zona de la lesión del “líder de la Cenation”. Estos ataques los realiza con su “dedo punzón”, escalones metálicos y patadas al torso. Umaga empieza a dominar la lucha, demostrando que era una bestia y un rival difícil de batir para Cena, pero este logra revertir un poco la situación, al lazar un escalón directo a la cara del samoano. Sin embargo, Umaga logra obtener el dominio de la lucha. Un detalle que si bien es simple, me encanta cuando Umaga aplica el “Bearhug” y un “belly to belly suplex”, trabajando la zona lesionada de John Cena.
Umaga busca los escalones para poder dañar al campeón, ubicándolo en la espalda de John para poder aplicar el “Running Hip Attack”, pero sin éxito. “The Marine” busca lograr el dominio de la lucha en el momento de utilizar nuevamente los escalones, atacando otra vez el rostro de Umaga, esperando que este no vuelva a pararse. Sin embargo, al subirse al esquinero, el samoano aplica el “Samoan Slam”, trabajando otra vez el torso de Cena. El retador busca una serie de “sentones”, en los cuales se apoya con las cuerdas, pero Cena aplica un “lowblow” para tener algo de vida en el match. Posteriormente, realiza un “Throwback” con ayuda de los escalones, mostrando algo de resistencia ante la paliza que le estaba propinando Umaga. Al obtener algo de momentum, aplica su clásica movida de “Five Knuckle Shuffle” y busca la FU (actualmente AA) y ocupar el escalón para dañar la espalda de Umaga, pero el peso del samoano lo impide y cae encima de Cena, haciendo sangrar a este. Con esto, le propina varios golpes en la cara y deja de realizar al verlo tendido en el piso, para que el árbitro empiece la cuenta de 10. Para sorpresa de Umaga, Cena logra levantarse y resiste a los golpes que le propina Umaga, pero se acaba su pequeño comeback al ser atacado por un “Samoan Drop”. Umaga, intentando terminar la lucha, busca el “Samoan Spike”, pero el líder de la Cenation lo evita. Sin embargo, este queda sin fuerzas y Umaga lo arrastra al esquinero. En este momento, Cena se recupera y aplica una Leg Drop desde el esquinero y busca atacar al Samoano con un monitor, golpeando a la cabeza de este, que estaba apoyada en el esquinero. Busca la acción fuera del ringside, pero Umaga lo detiene en el aire y golpea el torso del campeón, demostrando que era una bestia que resistía todo. Umaga buscaba el puntazo final, armando las mesas para realizar una especie de “Running Splash”, pero Cena logra evitarlo. La cuenta en contra de Umaga llega a 9, era un monstruo invencible. En ese momento, Armando Estrada desarma una parte del esquinero. Umaga aprovecha la situación e intenta buscar una “Samoan Spike” con uno de los fierros del ringpost, pero termina cayendo ante un STFU con las cuerdas, logrando así el campeón el conteo de 10.
El match es una joya. Es el mejor enfrentamiento del reinado de Cena en el 2007. Posee un tremendo storytelling, en el que Cena era una “especie de underdog” y Umaga era una bestia invencible y resistente. El triunfo de Cena no es de la nada, ya que aprovecha los errores de Umaga para poder vencerlo. Destaco el selling de Cena (probablemente, una de las luchas en las que mejor vende el daño) y las expresiones de Umaga son tremendas.
