Desperdiciar a Bryan en el kickoff es la guinda de la torta para una empresa que viene tomando puras decisiones como la corneta.
Más encima haces esto sin los campeonatos en parejas de SD en juego, con un tag de Raw que venía rivalizando con Revival y con un combate que no se siente especial. Daniel y los Usos intentan levantar esos puntos en contra con algunos compases de interés, pero nada superlativo. Un tag promedio en un posición irrelevante.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
MITB femenino: Bayley vs Carmella vs Mandy Rose vs Naomi vs Dana Brooke vs Natalya vs Nikki Cross vs Ember Moon.
Por Shut.
De menos a más. Los primeros compases no me gustaron nada porque las sentí a todas muy perdidas, en especial ese momento entre Mandy y Carmella que terminó con la ex campeona de SD yéndose del recinto. No tengo idea si tienen una historia detrás, pero se vio forzado y poco natural.
Más aún cuando luego aparece Carmella, en la versión 5.678 que realizan ese spot qlo. Del resto rescato lo realizado por Ember y su finisher desde una escalera hacia el ring y los compases finales donde podría haber ganado cualquiera. El desenlace con Bayley ganando el maletín estuvo bastante bien, en especial para aquellos que estamos en el carro de la californiana.
Valoración: 2 jumbitos 3/4.
Rey Mysterio vs Samoa Joe (c), United States Championship.
Por Rockstar.
WWE siendo WWE, la saga de Joe vs Rey siendo Joe vs Rey, lo gracioso es que prefirieron omitir MOTYs cargándose esta lucha por hacer luchas “sorprendentes” de un minuto.
Valoración: DUD.
Shane McMahon vs The Miz, Steel Cage Match.
Por Hit.
Lo de Shane es penoso. Su ofensiva es más cuma que cazuela de salchichas, dejando al pobre Miz con la misión de cargar a un bulto bueno para nada. Lo peor de todo, es que Shane sigue ganando en esta rivalidad, con un final que deja para pensar que no pudieron realizar el suplex desde la cima.
Lo sorprendente es que el público estuvo bastante involucrado (dejando de lado esos gritos por CM Punk) para lo poco que ofrecieron en el ring.
En fin, jubílate Shane y deja de robar ctm.
Valoración: 1 jumbito 1/4.
Tony Nese (c) vs Ariya Daivari, Cruiserweight Championship.
Por Shut.
Se esforzaron por dar algo sobre la media y se quedaron a media máquina. De todas formas, malo no es. Mi problema pasa en que ambos no son lo suficientemente carismáticos para cargar con la división en el main card de un PPV. Creo que las ideas que ha esbozado Nacho con nombres más potentes en 205 Live son necesarias tomarlas en cuenta.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
Becky Lynch (c) vs Lacey Evans, RAW Women’s Championship.
Por Hit.
Nada mal la lucha, sobre todo pensando que es el primer match relevante de Evans en su carrera, dejando claro que tiene un potencial más que interesante. La que me “decepcionó” un poco fue la irlandesa, ya que hace algunos meses la encuentro tensa en el ring.
Su ofensiva no se vio de lo mejor esta noche y espero que pueda retomar su mejor nivel lo más pronto posible. Espero algo más elevado en una posible revancha.
Valoración: 2 jumbitos y medio.
Becky Lynch (c) vs Charlotte, SD Women’s Championship.
Por Rockstar.
Una nueva edición de este ya clásico que lamentablemente ha envejecido muy mal y no por culpa de las luchadoras, sus combates siempre fueron buenos, sino por el overbooking y otras cosas extrañas que se han cargado todo lo que podrían hacer in ring.
Acá empezaron bien, bastante distinto a lo que ya había visto de ellas, pero el show se volvió soso, sin mucho tiempo para contar algo y todo para darle un nuevo título a Charlotte para que Bayley haga de las suyas. Quedé con un poker face, aunque quitarle el campeonato a Becky fue como sacarse un cacho.
Seth Rollins vs AJ Styles, Universal Championship.
Por Lone Wolf. El combate que la IWC venia pidiendo a gritos hace años por fin se realizaba. Y puedo decir que en líneas generales ha sido cumplidor. Los primeros minutos entre el campeón y retador se ven bien pero con un público que se notaba apagado haciendo que esa aura de “big match” se sintiera muy poco.
El intercambio de movidas entre ambos en cuanto ejecución es correcto, aunque con poca sustancia detrás y un ritmo que por momentos cae en lo tedioso. No es hasta el Ushigorishi de Styles donde agarra mejor ritmo el choque y el público despierta para alentar a su favorito. Se forman mejores secuencias entre ambos, especialmente con reversal (en especial cuando llega la ejecución del Styles Clash) y nearfalls que hacen la cuota de emoción aumento un poco. Al final “The Beast Slayer” logra conectar con el Stomp para llevarse la victoria.
Cumplidor para ser su primera interacciona en WWE. Tiene sin embargo varios no sell (en especial de Rollins) y unos primeros minutos poco destacados. En la mitad mejora y termina siendo mas digerible.
Valoracion: 2 jumbitos 3/4+.
Kofi Kingston (c) vs Kevin Owens, WWE Championship.
Por Carlos Matamoros.
Antes que nada, mi total rechazo a la falta de profesionalismo de parte de Alonso y César, quienes se negaron a ver el combate del actual campeón de la WWE. Y prefiero creer que es solo falta de profesionalismo y no racismo, pero bueno, ya está…
El match es agradable. Kevin es un heel cabrón y sabe cómo meterse no solo con su rival, sino también con el público. Kofi, por su parte, demuestra un poco más de agresividad en contraste con sus últimas actuaciones, las cuales le permiten llevar la lucha a un nivel bastante equiparado. Ritmo constante y con un resultado esperado, acompañado de unos últimos minutos bastante bien llevados por parte de las dos superestrellas.
Hay Kofi campeón aún, haters.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
MITB masculino: Drew McIntyre vs Randy Orton vs Ali vs Finn Bálor vs Andrade vs Baron Corbin vs Ricochet.
Por Shut.
Me tiene emputecido lo que están haciendo con Sami Zayn, la re csm empresa de mierda.
Enfrentamiento correcto, es difícil aburrirse con esta estipulación gracias a los spots. Y acá hubo uno bastante bueno como el sunset flip de Andrade a Bálor, con el irlandés recibiendo sin duda los golpes más brutales de la contienda (pobre espalda). No obstante, como dicta el bookeo, estos golpes no sirvieron de ninguna huea.
La dinámica de Drew con Corbin estuvo bien en especial cuando ambos deciden atacarse. Orton en la suya robando con lo único que le queda, el RKO, y un Ali que sin brillar tuvo sus momentos. Lo que no me pasó con Ricochet, a quien siento no aprovecharon del todo cuando estas son las luchas donde realmente puede hacer lo que mejor tiene: brincar.
Ritmo frenético que fue interrumpido por el conchadesumadre de Brock Lesnar, quien aprovechando que quedaba un cupo lo usó para aparecer y ganar el maletín. Para tirarse hasta los pelos de los cocos, por la cresta. Una vieja gloria quitando el spotlight a los jóvenes talentos, una vez más; con un tipo que no necesita de un MITB para tener oportunidades titulares y lo que es peor, alguien que no debería rondar ningún título mundial.
Si este final me lo hacían con Sami Zayn te lo aplaudía, porque generarías un heat heel brutal y posicionas a un gran luchador en una posición de oportunista inteligente de gran forma (por todo lo sucedido en backstage). Pero no, tenemos nuevamente a Lesnar que ni siquiera aparecerá en los shows portando algo que quedará en segundo plano nuevamente por segundo año consecutivo. Andate a la chucha, Vince.
WWE está en la mierda, y quien defienda lo indefendible, también.
Valoración: 3 jumbitos.
PD: Se buscan redactores para hacer los PPV de WWE, porque si esto sigue así, de este barco nos bajamos varios.
Empezamos con el análisis del evento. Nadie vio el kick-off, así que vamos de lleno a lo que importa:
Daniel Bryan vs Big Cass.
Por Cristóbal Meléndez Martin (Shut).
La mejor lucha de Big Cass en el main roster. Por lejos. Bryan es un crá, y ahondar en eso ya es redundante. ¡Qué alegría verte de vuelta en el ring¡
Sólido opener, con un historia sencilla pero no por eso menos efectiva. Bryan aprovecha sus hermosas patadas para castigar la pierna lesionada de Cass, sumado a un ataque agresivo contra el poste. El grandulón vende bien, pero no cae en la exageración y eso me gustó, puesto que por su estatura no debe mostrarse como alguien tan débil ante esta ofensiva de su rival. Ahí radica la gran inteligencia de Bryan en ir aumentando la intensidad.
Bryan es el gran face que tiene la empresa en este momento, porque además de contar con el apoyo mayoritario de la granda, logra que su rival reciba un gran heat heel. Y acá Big Cass lo logró dejando un match muy entretenido y que logra redimirse del feo choque en el PPV anterior.
Cass debe quitarle el títulos de los Estados Unidos al tata Jeff, se dice y no pasa nada.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
Sami Zayn vs Bobby Lashley.
Por Walter Merino (Lone Wolf).
No me cuadra en la cabeza cómo WWE decide sacrificar a uno de sus mejores entertainers en los últimos meses para poner over a un tipo tan penca como lo es Lashley. Y es que desde su regreso, The Dominator ha sido protagonista de los momentos menos importantes de los semanales y causando cero interés en la fanaticada.
En este combate lo único que se vio fue un Zayn temeroso que no pudo hacer mucho ante un Lashley que lo superó a base de fuerza. Sami no significó mucho problema para Bobby.
La directiva debería dejarse de juegos con Sami y buscar potenciarlo como se debe. El tipo desde su heel turn se le ha visto un crecimiento como entertainer y esta para cosas más importantes, no como pera de boxeo de un cono como lo es Bobby.
Valoración: 1 jumbito y medio.
Seth Rollins (c) vs Elias, WWE Intercontinental Championship.
Por Cristóbal Meléndez Martin (Shut).
Si con Cass rescataba su capacidad de no exagerar, acá pasa lo contrario con Rollins. Ya no me compro su dolor en la rodilla, menos cuando a los segundos te hace un Falcon Arrow o cuando ni siquiera Elias trabajó esa zona. Es poco coherente.
Nuestro músico favorito se enfocó más en la parte del cuello, cosa lógica pensando en el guitarrazo que le dio semanas pasadas. Era una prueba importante para Elias al ser su primer gran match en un PPV, y creo que cumplió con creces dentro de su rol como heel. Si bien debe pulir ciertos detalles, tiene pasta de sobra para estos enfrentamientos porque cuenta con el beneplácito de la gente.
Seth, en su estilo, que si bien prende a la grada (y en parte a mi igual), en la suma y resta no te logra convencer del todo. Ya el spot de la rodilla lastimada está muy visto, más con todos los movimientos posteriores que realiza como si nada hubiera pasado (los más potentes de hacer) cuando debería pasar lo contrario. Pero en fin, es imposible decir que esto fue malo cuando tienes detallitos interesantes. Y está Elias. Simple.
Valoración: 3 jumbitos 1/4.
Money in the bank ladder match femenino: Sasha Banks vs Becky Lynch vs Alexa Bliss vs Charlotte vs Natalya vs Naomi vs Lana vs Ember Moon.
Por Rafael Calderón.
Muchísimo mejor que el combate del año pasado, y eso que en esta ocasión tuvimos a Lana y a Naomi que son dos tipas nulas a nivel in-ring, pero bueno, aquí la acción estuvo presente en todo momento, con spots mucho más potentes con todas teniendo su momento de lucidez dentro del match.
Hubo varios careos potentes, que hicieron guiño a combates anteriores, como Charlotte contra Sasha, Becky vs Charlotte, e incluso un careo que me sacó una carcajada como lo fue el que tuvieron Naomi y Ember (un saludo a Wallo). Sasha fue quien tomó los golpes más arriesgados, y Alexa fue quien menos participación tuvo. El resto de las chicas cumplieron con su papel, y aunque siempre supe que la irlandesa no iba a ganar, por momentos me creí que ganaría. Sin embargo, el choque tiene algunos fallos, especialmente de coordinación, pues recuerdo dos que (lastimosamente) involucran a Becky, el primero cuando Naomi está subiendo la escalera y Becky ataca primero a Lana en vez de interrumpir a Naomi, quien demoró con su casi victoria para darle tiempo a Lynch de atacarla. El segundo, en el final, cuando Becky sube la escalera, tuvo tiempo suficiente para descolgar el maletín, pero, hizo tiempo para repetir el spot del año pasado con su casi victoria para que Alexa ganara.
Sin duda es una gran mejoría respecto al match de hace un año, y las mujeres se ven más afianzadas en este tipo de estipulación, además la acción dentro del ring fue buena. A pesar de la ganadora, es una lucha recomendable y mi favorita de lo que vi del evento.
Valoración: 3 jumbitos y medio.
Roman Reigns vs Jinder Mahal.
Por Rafael Calderón.
Soy un gran fan de Reigns, pero desde que dio tres grandes combates en enero ante Joe y el Miz, su nivel ha bajado considerablemente. Influenciado por el bookeo y su rival, o no, lo cierto es que este match es solo una muestra más de todo lo malo que ha hecho la empresa en torno a la figura de Roman. Y es que al público no le importó. A mí tampoco.
Jinder no es alguien con un nivel in-ring destacable, y a Roman lo venden siempre como un underdog que NO es. ¿El resultado? Un enfrentamiento altamente aburrido, con un dominio soporífero de Mahal, las intervenciones del indio cuyo nombre no me sé y el típico comeback un tanto cansino de Reigns para cerrar la contienda; es decir, lo mismo que puedes ver en un semanal pero sin comerciales.
Valoración: Medio jumbito.
Carmella (c) vs Asuka, SD Womens Championship.
Por Rafael Calderón.
Si el combate anterior fue malo, este no se queda atrás. Carmella es muy mala en el ring, horrible, y lo sentí mucho en sus momentos de dominio en los que quería cerrar el stream antes que seguir viendo el match. Por el lado de Asuka, lastimosamente, tras el fin de su racha con Charlotte, ha perdido gran parte de su esencia. Y ayer sin haberlo hecho mal, no siento que haya tenido la lucidez de otras luchas.
El momento final con Ellsworth entrando a distraer a Asuka vestido como ella y luego revelando su identidad no me gustó, no soy fan de James. Aunque reconozco que con él, el reinado de Carmella puede mejorar.
De todas formas, es un movimiento que más que generarme interés, me dan ganas de seguir sin ver los semanales que ofrece la empresa. Más cuando dejan en la mierda a Asuka.
Valoración: Medio jumbito.
AJ Styles vs Shinsuke Nakamura, WWE Championship, Last Man Standing.
Por Walter Merino(Lone Wolf).
Cuando pienso en un Last Man Standing imagino en cuáles serán sus límites para incapacitar a su oponente con la capacidad de entregar algo con drama.
Ahora lo que me entregaron en gran parte del combate, tanto Shinsuke Nakamura como AJ Styles fue cualquier cosa menos un Last Man Standing. Por momentos sentía que veía un combate normal o un Falls Count Anywhere pero no un LMS.
No tuvo intensidad, ni spots brillantes y esos momentos que te hacen querer agarrarte del asiento. Hay algunos buenos intercambios de golpes, cierto trabajo en la pierna de Naka por parte de AJ y un público que al menos cumple con alentar a ambos luchadores pero que no es suficiente.
Ya por momentos se sentía cierta pesadez por la duración y desarrollo del combate, y no es hasta cerca de los últimos 10 minutos donde el ambiente empieza a tomar color, donde la cuota de intensidad y dramatismo empieza a hacerse presente. Tuvimos desde low blows hasta finales falsos que hacían a la grada emocionarse más. Es finalmente AJ quien logra la victoria luego de un low blow y un Phenomenal Forearm contra una mesa.
Les faltó aprovechar más la estipulación. Tuvimos 5 encuentros entre estos dos y ninguno logró llenar las expectativas que se tenían.
Valoración: 3 jumbitos 1/4.
Ronda Rousey vs Nia Jax, Raw Womens Championship.
Por Rafael Calderón.
A diferencia del combate femenino por el título de SD, esta lucha me encantó. Ronda es demasiado genial, y en solo dos presentaciones sobre el ring ha conseguido brillar y callar muchas bocas. Nia también lo hizo bien en su papel, pero creo que es Rousey la que se luce más.
Jax centra su ofensiva en la zona media de Rowdy, no solo con sus movimientos típicos, sino también con alguna sumisión que la ex-UFC vende de gran manera. El enfrentamiento empieza con una ligera demostración de fuerza de Nia para que Ronda demuestre que tiene un buen repertorio de llaves de rendición y movimientos para debilitar a la campeona, Nia hace el trabajo a la zona media antes mencionado, hasta que tenemos el explosivo y bastante interesante comeback de Rousey que hace gala de un fabuloso striking y unas más que geniales expresiones faciales.
El final del combate con Ronda donde consigue aplicar el armbar me parece un buen falso final que le agregaba drama al combate, pero la intromisión de Alexa hace que quede con ganas de más. La intervención de Alexa arruina el encuentro.
El post match me deja dos cosas claras, la primera, Alexa vs Ronda tienes hartas chances de darse en Summerslam a menos que Stephanie decida otra cosa; y segundo, vamos a tener a Alexa en torno a un título por siempre, por su imagen, y porque ha sido a la que más han cuidado detrás de Charlotte. Cosa que no me gusta.
Valoración: 3 jumbitos 1/4+.
Money in the bank ladder match masculino: Braun Strowman vs Kofi Kingston vs The Miz vs Kevin Owens vs Bobby Roode vs Samoa Joe vs Finn Bálor vs Rusev.
Por Ratael Calderón.
Tuvo sus momentos, pero no me agradó del todo, pues siento que le faltó un poco más de tiempo. Hay partes en las que me aburrí y el ganador no es el adecuado, al igual que en el femenino.
Todos los participantes tuvieron su chance de brillar, pero estoy un poco cansado de que siempre sea todos vs Braun y de que Strowman siempre triunfe. Siento que están gastando mucho esa fórmula de Braun “matando” gente y destruyendo cosas, como si no supieran que más hacer. En ese sentido, creo que si se cambia este concepto terminarán perjudicando al monstruo entre hombres.
Centrándome más en la lucha, no fue la gran huea, y lo cierto es que muchos spots llamativos no hubo. El momento en el que Braun lanza a Owens desde la escalera podría ser, del resto vi chispazos de algo interesante, como el Miz tratando de ganar mientras todos atacaban a Strowman
Me cuesta recordar grandes instantes dentro de la contienda. No es algo para recordar.
La victoria de Braun es innecesaria, puesto que, dado su bookeo, tiene muchísimo más fácil acceder al ME y ganar el título. Su victoria aquí solo me confirma que la empresa no sabe aún que hacer con él y le dan el maletín como un calmante temporal mientras el vago de Lesnar se digna a volver a luchar. The Miz, Owens y Joe, eran mucho mejores opciones, e incluso Rusev, que ahora mismo, muchas opciones de optar al título no tienen (salvo Joe si entra en rivalidad con Styles).
Nos acercamos a una nueva edición de MITB y para ello recordamos este artículo realizado en junio del 2018. Tras ese año, ¿algún otro que no haya merecido ganarlo?
Jack Swagger
Por Alonso Salazar
Sin duda alguna, es el ganador más “desabrido” que ha tenido la estipulación antes de la creación del PPV temático. Si bien es cierto que era un proyecto interesante en su momento y tuvo un run decente con el título de ECW, en esa época estaba bastante verde y generaba muy poco interés en la grada (su segundo semestre del 2010 es muy olvidable).
Dicho esto, tuvo un reinado terrible, para el olvido, con poco spotlight y quitando cierto prestigio al título mundial de Pesos Pesados (pasamos de los reinados de Punk, Taker y Jericho a esta mierda).
Al terminar su reinado, perdió su rol de “estelarista” y no volvió a tocar la zona alta del elenco.
Por César Soto.
Le voy a quitar cierta culpa a Swagge, porque que mal roster había para ese MITB en WrestleMania 26, malísimo. Si no es el peor pega en el palo; un lowcard como Kofi; el siembre aburrido Drew; Evan Bourne… por favor.
Innecesario tener dos hombres sin credibilidad que solo te sirvan para hacer el spot. Se suman los eternos midcards sin it factor, MVP y Matt Hardy; un tipo que a esas alturas ya debió haber estado despedido, Shelton Benjamin; más Kane, Ziggler y Christian, quienes me parecían los únicos y reales candidatos.
Si fuera por mí, se lo hubiese dado a Christian a ojos cerrados, pero bueno, eligieron a Swagger quien a esas alturas era un buen luchador, pero que no había regalado nada interesante en el aspecto del entertainment.
Se entiende que quisieran pushear a un talento joven, ¿pero necesariamente tenía que ser a un tipo que tenía un gimmick similar al de Kurt Angle? Quizás lo comprendería si era una jugada solo para fastidiar a TNA y Angle, pero no sé, me parece un desperdicio, y su olvidable reinado lo reafirma.
No tuvo ninguna lucha para recordar, cuando por el título de ECW había dejado joyitas. En su run como campeón hubo infumables SmackDown donde nunca brilló. Si un luchador no sirve para carrear un show, en mi opinión no merece ser campeón mundial, y Jack, ni siquiera cuando más over estuvo con el gimmick de Real American, me pareció capaz de hacerlo.
Baron Corbin
Corbin uno de los pocos en fallar su canjeo del MITB.
Por César Soto.
No estaba preparado ya que no había demostrado nada, absolutamente nada ni en NXT ni en el main roster. El maletín fue un regalo, como uno que te ganas en un bingo, en la lotería. Es como cuando te encuentras dinero en la calle de casualidad. No puedes ser campeón mundial así.
En ese instante Corbin no tenía ninguna lucha realmente buena, además de un nulo manejo del micrófono. Solo tenía “presencia”, que es nada más y nada menos que por ser un tipo alto e imponente, algo que también tenía Test o Bobby Lashley en su primer run. Ambos que fracasaron por su escaso carisma.
Insultar al hombre de la milicia fue lo mejor que nos pudo haber pasado, sino nos habríamos comido un reinado mucho más aburrido que el de Mahal.
Por Alonso Salazar.
Lo admito: Corbin está lejos de ser uno de mis preferidos, pero puedo aceptar que tiene algunos factores para llamar la atención a un puñadito de fans. El tema, es que no ha desarrollado casi ningún aspecto a nivel de personaje (culpa del bookeo o no, es la verdad) y que vive del finisher espectacular que tiene (al igual que otro).
En otras palabras, no estaba lo suficientemente preparado y por ende, no se puede optar a un título mundial antes de ese proceso obligatorio para la mayoría. En definitiva, la WWE se equivocó y se apresuró en darle este privilegio a alguien verde, con tan poca construcción y con una capacidad de atracción al público.
Para tristeza de su puñado de fanáticos, no logró hacerse con el campeonato, decisión que considero correcta, ya que la WWE pudo enmendar lo que yo considero un error (aunque la forma es bastante discutible).
John Cena
Por Alonso Salazar.
De partida, siempre he estado en contra que alguien con un estatus tan grande gane este tipo de premios, lo que deben servir para consolidar a gente del mid/upper (reemplazando al Royal Rumble en ese sentido).
El tema acá, es que lo gana Cena, LA PUTA CARA DE LA EMPRESA. ¿Cuál era la necesidad de darle este maletín? Prácticamente ninguna. Solo aumentar la lista de palmarés que tiene dentro de la empresa de Vince. Ni hablar de su pésimo run como Mr. MITB, de su lucha olvidable con Punk y del desperdicio al no poder ganar la lucha.
Por César Soto.
El peor MR. MITB de todos, pero por lejos jajaja.
Esta vez no estamos hablando de alguien a quien le dieron un push innecesario o alguien que no debía ganar, estamos hablando de ambas cosas, sumado a un cobro de maletín y posterior lucha horrible. Es el peor Cena vs Punk de todos, además.
Una lucha que no emocionó a nadie, en la que se estaba bookeando a Punk muy débil para justificar su cambio a heel, y en la que interfiere Big Show dejando toda la situación como un absurdo. Botaron el maletín a la basura. Fue una decisión ridícula, especialmente cuando John Cena solo necesita un micro para retar a un campeón…
Damien Sandow
Por César Soto.
Un chiste. ¿Qué proyección veían en Sandow? Incluso en Swagger veía algo de proyección, al menos como wrestler, pero Damien no tenía nada para ofrecer (hasta ese entonces).
Un luchador normalito, con un run tag team promedio, con ningún título individual midcard en su palmarés. Fandango me parecía mucho mejor opción por ejemplo, al menos venía over.
Pero lo de Sandow no tiene ni pies ni cabeza teniendo en ese combate a los eternos infravalorados por la empresa según la IWC (Cesaro, Barrett, Rhodes). Además tenías a Dean Ambrose, en verdad es para reírse, y si bien la posterior historia con Cody sacó algo de jugo, ni siquiera finalizaron su rivalidad con un gran combate.
Este fue el mejor entierro de Cena, Sandow no tiene la culpa, pero al menos John enterró la nefasta decisión de darle el maletín. Además de todo esto vino el Sandow imitador y posterior Mizdow, un personaje que tenía todo el carisma que le faltaba a su plano personaje que portaba el maletín.
Por Alonso Salazar.
Una de las decisiones más cuestionables que ha tomado WWE. Sandow no era un midcard establecido, no tenía mayor credibilidad y su personaje no tenía mayor proyección. Sandow era un meme para ganar el MITB.
Es como que lo ganara Ellsworth. Fuera de ello, en esa lucha no tenían mucha variedad: Fandango no era para carne de Main Eventer, Cesaro no llamaba tanto la atención, Ambrose estaba verde para ser campeón mundial y seguía con The Shield. Quizás Barret o Rhodes eran las opciones más correctas, ya que tuvieron un recorrido por el midcard y estaban consolidados en esa zona. Lo bueno, es que la WWE se arrepintió y tomo la decisión de que perdiera la lucha titular.
Randy Orton
Orton uno de los peores ganadores del MITB.
Por César Soto.
Resultado cancerígeno, ganador sidoso, darle el maletín solo para cobrar en una lucha que se veía a kilómetros que lo haría, y con Triple H de árbitro. Asco.
De partida Orton no necesitaba el maletín, y no solo eso, sino que los planes eran llevarlo de campeón hasta WrestleMania para que defienda contra Batista, perdonen la expresión, pero que csm. Por cosas como estas es que Randy Orton está tan sobrevalorado, le llueven los logros cuando él ni siquiera los busca, no hace nada por conseguirlos.
Ese Orton de 2013 era un face plano, que no tuvo ninguna promo buena en el año, y ningún combate destacable más que sus luchas con Bryan en RAW. Randy Orton es a veces tan poca cosa, que me da mucha lata que se la jueguen con él para cosas tan importantes.
Como cara de la autoridad se veía bien, porque traspasaba al kayfabe, un compadre que de verdad te lo impone la empresa y no eligen los fans. Ellos querían a Daniel Bryan. Por suerte se enmendó el error, pero nada quita este verdadero circo que fue ver a Orton con el MITB.
Por Alonso Salazar.
La misma situación que Cena, pero peor aún ya que es Orton. El resultado no pudo ser más predecible, ya que se sabía que “The Viper” le quitaría el título a Bryan luego del match contra Cena.
El escenario era posible de ver con mucho tiempo de anticipación. Otro logro que le llegó de regalo a Orton, sin poner un mínimo de esfuerzo ante la mediocridad que lo invade hace años.
A pesar de llevar solamente 8 ediciones de existencia, Money in the Bank es un PPV que se ha labrado un nombre y una tradición. Lo anterior es en parte por la confluencia de grandes encuentros, varios que escapan de la estipulación.
Como previa de una nueva edición algunos de los colaboradores de la página hemos recopilados los mejores matches que ha tenido el PPV. Eso sí, no fue reseñado el Punk vs Cena del 2011, dado que ya se le dedicó un artículo propio.
Si a la gente le preguntan por lo mejor de Money in the Bank 2012, posiblemente te van a hablar del culebrón entre Bryan, Punk y AJ Lee. Pero la verdad este combate me gusta más.
No siempre se ha valorado el enorme nivel in-ring de Sheamus ni el más que decente de Alberto y por eso no es de extrañar que este choque no sea muy recomendado en ninguna web (aunque me pregunto cuantos lo han visto para juzgar).
En los shows anteriores el mexicano atacó el brazo izquierdo del irlandés y ese build-up tuvo continuidad, que giró en torno al limbwork a la extremidad superior de Sheamus.
Una rivalidad olvidada
La ofensiva de Alberto es muy coherente ya que cada vez que está seguro de su dominio se enfoca en el brazo. Y concentrarse en la extremidad superior tiene sentido ya que es precisamente la zona que toca el Cross Armbreaker. El limbwork vale menos que Impact cuando no se le acompaña de un buen selling, pero en ese sentido Sheamus estuvo totalmente a la altura.
El irlandés tuvo que prescindir casi todo el duelo del brazo izquierdo y sus expresiones faciales fueron cambiando de confianza a dolor. De hecho él parte dominando, para después perder cada vez más terreno.
Sheamus vs Del Río en Money in the Bank 2012.
Sheamus tenía la extremidad superior castigada pero no las piernas y eso sumado a que es alguien ágil para su tamaño, pudo emprender varios intentos fallidos de comeback. Aquí se notaba la contraposición entre su estilo brawler y la técnica de Alberto.
Como por ejemplo cuando el irlandés lo agarra en el Ten Beats y el mexicano trata de sujetar el brazo izquierdo hasta que se lanza fuera del ring haciendo que el brazo golpee con las cuerdas. Pero la suerte se le terminó acabando y tras fallar un Enzuigiri, Sheamus lo agarró en el White Noise para luego rematarlo con el Brocke Kick.
Algo para criticar al match es el comeback, que no se siente como algo tan explosivo. Y la causa es que el combate tiene demasiados momentos en que la acción se siente algo igualada, pese a la ventaja del mexicano. De todos modos todo esto es muy notable, y más con el fallido de cash-in de Ziggler en el post-match.
Un capítulo más de la destacada rivalidad entre Seth y Ambrose, que desde su inicio en el 2014 nos ha regalado combates entretenidos en PPV y semanales.
Esta vez al conflicto se le añadían dos ingredientes especiales: escaleras y el campeonato de WWE suspendido en lo alto.
Un clásico entre los ex Shield
Este inicia con ventaja de Ambrose dispuesto a barrer con Rollins. El Golden Boy de la autoridad logra reaccionar por momentos pero Dean tras lanzarle la escalera a Rollins en pleno Suicide Dive vuelve a llevar la mejor parte. Rollins parece no reaccionar hasta que encuentra la que necesitaba tras lastimar la pierna del medio lunático de un silletazo. El campeón sigue explotando la pierna lastimada de su oponente, incluyendo ataques con la escalera y un Figure 4 Leg Lock.
El selling de Ambrose diría que hasta cierto punto funciona, en sus expresiones faciales se puede notar pero cuando llega su comeback, aunque poco a poco deja de vender el daño en la pierna hasta que desaparece.
Luego de un paseo por el público, Dean queda bien cerca de la victoria en dos ocasiones, la primera cuando manda en Backdrop a Rollins para partir una escalera y la segunda luego de un Dirty Deeds en la mesa de anunciadores, pero el campeón no le deja cantar victoria, llegando incluso a aplicarle el Pedigree. Rollins dispuesto a garantizar su victoria le aplica dos Powerbombs en la barricada y uno en una pila de sillas y una escalera. El final es tremendo, ambos descuelgan el título pero Rollins lo llega a sostener llevándose la victoria por poco.
Buena química la de estos dos. A destacar también la labor del público que se metió en el combate con cánticos a favor de Dean y abucheos e insultos para Seth. El campeón luce más fuerte y determinado que en ocasiones anteriores. Los factores negativos vienen del lado de Dean en su selling a la pierna y en su comeback final que me pareció como de Superman, algo que no me acabó de convencer. Por todo lo demás tiene mi aprobación.
El Money in the Bank de ese año es uno de los más llamativos porque la historia se centraba más que nada en la rivalidad entre Ambrose y Rollins (mejor rivalidad del año 2014 por escándalo).
Este último había traicionado a sus compañeros de The Shield, provocando la rabia de Ambrose quien desde el minuto uno le pone un blanco en su cabeza.
Acá vemos todo lo que deberíamos ver en una lucha de estas características, una historia entre dos o más participantes, spots chulos (Kofi eterno mvp y eterno perdedor en este tipo de combates) y un ganador que lo necesitaba. Y más allá de lo predecible del resultado, estaba claro que la única opción viable era el arquitecto, quien posteriormente haría historia en WM 31.
Dos íconos de la industria. El hombre que ha sido rostro de la compañía de entretenimiento deportivo más grande del mundo, cara a cara contra aquel trotamundos que triunfó a donde fue, pero que le faltaba conquistar un imperio llamado WWE. John Cena y AJ Styles finalmente iban a estar cara a cara en un combate que era catalogado hasta ese entonces como un ‘dream match’.
Y sí que era dream match, pues nunca se habían enfrentado a pesar de lo mediático de ambos. AJ Styles, después de marcar un debut bastante bueno en Royal Rumble; de enfrentarse en varias ocasiones a Chris Jericho; y de estar a nada de quitarle el título de la WWE a Roman Reigns, haría un polémico turn heel al atacar ferozmente a John Cena junto a sus nuevos (antiguos) compinches de The Club: Karl Anderson y Luke Gallows.
Sobre el match
Cena vs AJ I en Money in the Bank.
El combate no iba a demostrar odio, porque plenamente no existía. Es más, lo que más abundaba entre estos dos, a pesar de las constantes puyas lanzadas semana tras semana, era respeto. Cada uno sabía que tenía en frente a un rival de temer, a un SOB que se sobrepasaría sus límites con tal de alcanzar la victoria.
Pasando a materia de lucha, tenemos a nuestra vista el mejor de todos los enfrentamientos que tuvieron. Un combate con ritmo pausado cuando se lo requería, y con ritmo frenético cuando debía estar. Es casi media hora de una lucha bastante entretenida, con un público metido al 100%, y por supuesto, con el aliciente de tener a dos potencias del wrestling dentro de un mismo ring.
Psicología y storytelling al por mayor. Coherencia. Timming. Nearfalls adecuados. Lo hicieron todo bien… hasta los últimos dos minutos de combate.
En una secuencia bastante forzada, en donde el árbitro prácticamente persiguió las piernas de AJ en el aire mientras éste estaba en los hombros de Cena, seguido de un golpe que a todas luces ni conectó al réferi.
Marca un horrible golpe al árbitro que iba a ser aprovechado por The Club, que con su Magic Killer sobre Cenaiban a dejar AJ encima de este, para que milagrosamente el árbitro se recupere del golpe y haga la cuenta de tres.
Creo que ese lamentable final no debería empañar un match, que sin duda, merece una gran puntuación. Y eso que no duró más de una hora. 😉
Bryan y Punk llegaban a este enfratamiento en una historia amorosa de por medio que incluía a AJ Lee, así que en la previa tenia mis dudas sobre este combate. Pero me llevé una gran impresión, porque fue algo muy bien trabajado y que jugó de gran forma con el drama en torno a la figura de AJ (que hacía de árbitro especial), pues no sabías si iba a beneficiar a Punk o a Bryan.
Pasando a la lucha, Bryan es un crack durante todo el encuentro, cada vez que atacaba a Punk lo hacía enfocándose en la zona media de este, ya sea con sus poderosas patadas, o con el uso de elementos, al ser un enfrentamiento sin descalificación.
El combate
Bryan vs Punk en MITB 2012.
Punk no se queda atrás y golpea a Bryan también en la zona media y cada vez que puede golpea la cabeza de Daniel.
Bryan es el heel, y actúa como tal al usar trucos sucios para tomar la ventaja o mantenerla, además es alguien que no le importa cómo ganar y por eso, hacia el final del combate, vemos cómo trata de que AJ lo ayude.
Punk como face lo hace bien, y aprovecha sus momentos de gran manera. Los reversals de parte de ambos sumaron al combate. Por ejemplo, cuando Punk falla un Diving Elbow y cae sobre la silla, tras esquivarlo, Bryan busca dañar ese brazo con el Yes Lock, y por eso cuando Punk no gana con el GTS va por algo más contundente como lo fue el Back Suplex desde la tercera cuerda contra la mesa.
Gran choque, buen manejo de la estipulación introduciendo los objetos usados de buena manera. Se jugó bien con el drama al incluir a AJ y la ofensiva de ambos fue genial. Sin embargo, el selling creo que pudo ser un poco mejor, pero es eficiente, y el desarrollo de la lucha fue el correcto.
El año 2013 no fue nada despreciable para la división de parejas y este combate es una prueba de ello. Aunque también el hecho de que el match forma parte del kick-off es testigo de la baja importancia que la empresa le suele dar a la división. Reigns y Rollins funcionaban muy bien como equipo, contrastando sus estilos de Powerhouse y Highflyer.
En cuanto a los Usos, su calidad in-ring no es discutible. Luego de los primeros compases igualados, Jimmy cae bajo las garras de The Shield, lo que incluye un momento en que dominado por Roman trata de dar el relevo pero Seth ataca por detrás a Jey y lo saca del esquinero.
El comeback se pierde gracias a esos necesarios e interesantes comerciales que se meten en los kick-off. Los Usos se apoderan del combate castigando a Rollins y les hace la misma treta frustrando su relevo. La secuencia final es muy buena. Luego de salvar a Seth, Reigns reaparece justo para frustrar un super-Samoan drop de Jimmy, que lo deja listo para el Powermbomb contra el esquinero y la Spear.
Como típico match de pre-show la rivalidad no es el fuerte y eso se refleja en lo simple de la storytelling. Pero en contraste, es intenso y rápido, por lo que no aburre en ningún momento. Todo lo contrario a lo que te produce el Randy Orton actual.
Como participantes para el clásico combate de escalera por el maletín tenemos a Shinsuke Nakamura, Baron Corbin, Sami Zayn, Dolph Ziggler, AJ Styles y al ese entonces Campeon USA, Kevin Owens. Estas seis superestrellas se disputarían la oportunidad de conseguir hacerse con un maletín que puede marcar las carrera de un luchador y realizar sus sueños de campeonato mundial.
Sami el MVP
El enfrentamiento es entretenido, y es que la acción es tremenda gracias a los spots y gran participación de los involucrados. Incluso antes de sonar la campana ocurre algo notable, cuando Corbin saca de circulación a Naka para tener más posibilidades de victoria. Quiero destacar principalmente la actuación de Sami Zayn, quien definitivamente en sus momentos dejó buenas sensaciones como cuando le aplica un Sunset Flip Powerbomb desde lo alto a Ziggler o sus interacciones con Owens (que como siempre cumplen).
Otro spot a destacar es cuando AJ queda cerca del triunfo pero Ziggler le quita la escalera, quedando colgado solo del maletín y buscando sostenerse a como dé lugar como si el piso fuese lava, pero al final terminaría cayendo.
Un público bastante metido en el combate siendo Sami, Naka y AJ los más ovacionados. Otro de los momentos del enfrentamiento es cuando Shinsuke vuelve y luego de despacharse a medio mundo se topa con Styles. Los dos hacen a un lado la escalera y se enfrascan en un genial intercambio de golpes en medio de un público emocionado. Ambos siguen batallando en lo alto de la escalera hasta que un oportunista Baron Corbin derriba a ambos y descuelga el maletín para ganar el combate.
Ordenado, correcto, spots emocionantes y demás es lo que nos entregó este match. Me hubiese gustado que Kevin Owens tuviera una participación más sólida en el combate, porque no se le vio muchos momentos de dominio y termino comiéndose los spots más duros del encuentro. De los mejores MITB Ladder Match de los últimos años.
Ziggler llegaba a este evento en busca de una redención. Su principal objetivo era aquel cinturón que Alberto le había arrebatado en aquel genial combate que tuvieron enPayback. El canjeo en el RAW posterior a WrestleMania, había dejado al rubio bastante over. Sí, uso palabras mayores.
Over es el término perfecto de lo que Dolph representaba en ese momento, porque lograba mantener al público en su bolsillo de manera sorprendente.
Intercambio de roles
Por su parte, Alberto había visto como el público se había puesto en su contra. Como aquellos que lo vitoreaban desde hace algún tiempo atrás, ahora lo abucheaban hasta el cansancio por el surgimiento de una nueva figura en la palestra, como lo era Dolph en este caso.
La frustración que llevaba consigo lo introduce a su ya calcada agresividad mostrada desde su debut, con la cual, logra destronar a Dolph en primera instancia.
Este match de Money In The Bank te cuenta algo parecido. Aquel chico que, a base de ímpetu y confianza, mucho de ello gracias a tener a todo el mundo de su lado, se enfrenta sin miedo a alguien, en pocos términos, despiadado. Por ello, en el inicio podemos ver varias secuencias en la que Dolph hace gala de un frenesí digno de alguien que está dispuesto a comerse el mundo.
Como no podía ser de otra manera, Alberto reacciona de la mejor manera posible: Enzuigiri. Sabe que Dolph pasó por conmociones, y que al atacar ese sector del cuerpo, iba a pasar a tener un dominio más prolongado.
La lucha pasa por muchas secuencias así, en las que se destaca la rapidez y el timming, pero sobre todo algo importantísimo: la coherencia, porque aunque el final con la DQ provocada por AJ Lee no sea del agrado mayoritario, te cuenta que hubo un antes y un después en la actitud de Ziggler.
Rollins ganó el título en este Money in the Bank, pero…
Por Rafael Calderón.
Uno de los mejores combates de Rollins de forma individual en WWE. Y uno de los grandes combates de Reigns desde su meteórico push allá por 2015.
El planteamiento es muy curioso, pero en cierto aspecto comprensible. Roman llega como face y Rollins como heel, sin embargo, el odio acumulado de Roman hacia Seth lo lleva a actuar como villano.
La primera mitad de la lucha es un dominio genial del samoano que corta cualquier intento de comeback del “Arquitecto”, menospreciándolo y golpeándolo con dureza.Siempre enfocándose en la espalda y en la cabeza de su oponente.
Seth va llegando al comeback definitivo poco a poco, de buena manera, atacando la cabeza de Reigns hasta llegar a la segunda parte del combate. Se hace más parejo con la agresividad de Roman cada vez que ataca a Rollins. Este último en una faceta face mucho más ordenada en términos de uso de su ofensiva.
Los instantes finalesme parecen geniales, pues tenemos uno de los mejores reversals que he visto a la spear.
La performance heel de Reigns me parece absolutamente brillante y Rollins también cumple con su faceta face. Aunque su ofensiva no lució tan desordenada como siempre, lo cierto es que ese Superplex+Falcon Arrow me parece horroroso.
El post-match con el canjeo de Ambrose y su posterior coronación es sin duda, uno de los momentos que más he disfrutado viendo wrestling.
Valoración: 4 jumbitos 1/4 al combate y 5 jumbitos a la coronación de Dean.
El MITB (Money in the Bank) cambió el pro-wrestling introduciendo ese maletín que en cualquier instante puede ocasionar un title change. Los canjeos son todo un momento, pero no siempre es EL momento siendo que tiene el potencial para serlo. Hay algunos como el de Swagger del 2010 que se olvidan a la semana. En esta ocasión hablaré de esos que se trabajaron tan bien que se han ganado un lugar en mi corazón lleno de sangre y grasa. Aclaro eso si que no usaré jumbitos, ya en su gran mayoría los canjeos son segmentos antes que matches a los que se les puede poner nota tan especifica.
7. Alberto del Río (c) vs Dolph Ziggler, World Heavyweight Championship, Raw 19/04/2013.
Muchos esperaban que Dolph sería el primero en canjear en Wrestlemania pero no fue así. Por eso fue una satisfacción que al final la música del rubio de Hollywood sonara pero al día siguiente. Alberto tenía la pierna lastimada por Jack Swagger y apenas pudo dedicarse a resistir antes de recibir el Zig Zag, Lo realmente destacable es que la gente se notaba hastiada del mexicano y en cambio, Ziggler que estaba muy over fue recibido como un rey. Por lo tanto, debe ser uno de los cash-ins mejor recibidos de todos los tiempos. Eso sí y mirando el vaso medio vacío, hay un bookeo claramente deficiente cuando el heel fue el ovacionado aquí.
6. John Cena (c) vs Rob Van Dam, WWE Championship, Extreme Rules match, One Night Stand 2006.
RVD utilizó el maletín del MITB de un modo muy legal, acorde a su postura babyface.
La dinámica normal del canjeo es que el retador aparece de la nada para aprovecharse del campeón en un momento en que está especialmente débil. Pero también está el poco usado recurso del maletín en una lucha planeada de antemano.
En este caso, RVD era un babyface que se arriesgó por ganarlo de frente, pero en un escenario que le convenía. ECW volvía a abrir las puertas en el Hammerstein Ballroom y Van Dam era un ECW original. El público iba a estar totalmente a favor de RVD y en contra Cena siendo oriundo de WWE. Eso ya se ve en las entradas cuando el público tuvo el descaro de tirarle de vuelta su camiseta a John.
Pero aún con el escenario a su favor, Van Dam demostró una gran imprudencia al retar a Cena en una contienda justa. Comenzó dominando en el combate pero a la larga John hizo de la lucha suya y daba la impresión de que podría haber ganado limpiamente. Tendría que intervenir Edge para determinar la contienda, en medio de unos fervorosos “Thank’s you Edge” del público. Finalmente y con Cena abatido RVD pudo aplicar la five-star splash para ganar por fin el título mundial. Esto no solo era una victoria de Van Dam sino que también una victoria moral de ECW sobre WWE, lo que hizo aún más grande la celebración con el roster en el post-match.
5. John Cena (c) vs Edge, WWE Championship, New Years Revolution 2006.
Edge, el primer hombre en tener dos maletines, a pesar de haber ganado un solo MITB.
La primeras veces siempre tienen un toque de sorpresa y de momento histórico. Ya sea el primer Hell in a Cell, el primer Royal Rumble o el primer Asylum match (recordar que ésta página la dirige un fan de Jericho). Y así pasa con el primer canjeo. Cena sangrando había derrotado con un Roll-up a su último rival de la Elimination Chamber para retener totalmente extenuado. Momento en que aparece Edge y canjea el maletín. El campeón estaba tan mareado que apenas conservaba el equilibrio y si bien aguantó la primera Spear, la segunda lo destruyó. Esta victoria no solo representa el primer momento en que el maletín fue utilizado, sino que a la vez la alargada consagración de Edge.
4. Seth Rollins (c) vs Dean Ambrose, WWE Championship, Money in the Bank 2016.
Reigns y Rollins pelearían por el título en Money in the Bank, mientras que en esta historia de antiguos compañeros Ambrose era otra vez dejado de lado. Pero Dean ganó el maletín y esa misma noche apareció para hacer su canjeo. QueSeth le ganase limpio a Roman es un gran momento, pero lo de Ambrose canjeando al instante siguiente es épico. Por fin se coronaba quien nunca había sido campeón mundial ni aparecido en el Main Event de Wrestlemania y la celebración en el ring con varios miembros del roster estuvo a la altura de ese instante ¿Quién diría que ese día iban a ser campeones mundiales los tres ex-miembros de The Shield?
3. Jeff Hardy (c) vs Cm Punk, World Heavyweight Championship, Extreme Rules 2009.
Uno de los canjeos que derivó en una gran rivalidad.
En mi opinión, uno de los canjeos más infravalorado de la historia. Y en gran parte es porque hay un notable turn heel de por medio. Jeff Hardy acababa de luchar contra viento y marea para quitarle el título a Edge en un ladder match. Y justo cuando celebraba con la pierna magullada, sonó la música del babyface Punk. El otro cash-in con turn fue el de Bryan traicionando al Big Show el 2012, pero no me pareció tan grande porque ni de broma el gigante estaba tan over como Jeff el 2009. Daniel hasta generaba simpatía en algunos fans por ese robo, mientras que lo del hombre Chicago dio paso en los siguientes shows a un heat tremendo de la grada.
Además, el canjeo en si es un combate corto muy interesante. Punk llegó y le aplicó el GTS a Jeff seguro de la victoria, pero no, hay un nearfall que hace ruido en toda la grada. El de Chicago trata de terminar rápidamente el match para que Hardy no recupere el aliento y es sorprendido por un roll-up que llega a la cuenta 2. Punk está impactado y consciente del peligro, pero no pierde la calma y le da una patada de karate junto al GTS que termina de destruir a Jeff. Lo mejor es Punk celebrando como un babyface que se ha ganado el título a mano limpia.
2. Brock Lesnar (c) vs Roman Reigns vs Seth Rollins. WWE Championship, Wrestlemania 31, 2015.
Grandes canjeos: el de Seth Rollins en WrestleMania 31.
El Main Event de Wrestlemania 31 parecía que no iba a dejar satisfecho a nadie, entre la opción de darle el título a Reigns y la de alargar el reinado de Lesnar, pero los bookers se guardaban un as en la manga. Nunca se había hecho el canjeo en el Main Event del magno evento ni se había usado el maletín para transformar un singles match en una triple treath. Por eso, fue totalmente inesperado que en el momento de mayor destrucción mutua del combate titular haya aparecido Seth a capitalizar. Luego de unos compases que terminaron de cerrar un match perfecto, Rollins salía campeón mundial del Main Event de Wrestlemania. El robo del siglo.
1. The Undertaker (c) vs Edge, World Heavyweight Championship, Smackdown 11/05/2007.
La Superstar Categoría R retó en Raw al dueño del maletín del MITB Mr. Kennedy, que era de la marca Smackdown y se lo ganó. Como miembro de Raw la lógica dictaba que en un futuro Edge estaría retando al campeón de su marca, pero esa misma semana se terminó de desarrollar el sorprendente giro de acontecimientos.
En Smackdown The Undertaker retuvo tras empatar con Batista en una sangrienta Steel Cage. Para colmo de males, Mark Henry llegó a destrozar al ya de por sí cansado Deadman. Nada hacía pensar que en ese momento sonaría la música de Edge. El canadiense llegó y cubrió, pero Undertaker sobrevivió al pin. La expresión de miedo de Edge lo decía todo, pero cuando el Deadman trató de hacer su clásica resurrección las fuerzas lo abandonaron y cayó de lado. El canadiense hizo la preparación de la Spear más dramática que nunca y fusiló al Undertaker. Muchos grandes momentos tiene el oportunista máximo, pero este es el más sobresaliente.
Los canjeos que todo el mundo ve venir no tienen ninguna gracia para mí, como cuando Orton despachó a Bryan en Summerslam 2013. Y en el factor sorpresa, el cash-in que reviso en esta ocasión cumple con creces. No solamente es de los primeros canjeos, sino que además es el único que se hizo entre miembros de distintas marcas. Otro detalle que se le puede destacar mucho, es que le dio al público un motivo para odiar al nuevo top heel de Smackdown, Edge. Y paralelamente, el Undertaker salió reforzado ya que perdió el título de mala manera. No es casualidad que a la larga esta rivalidad se terminó asentando en el Main Event de Wrestlemania 24.
El 2011 fue un año donde se produjo uno de los encuentros más memorables en la historia de WWE: John Cena vs CM Punk en MITB.
Por un lado, el ace, la cara por años y el hombre consolidado a rabiar. Por otro, el rebelde que exigía lo que pertenece. Bajo ese concepto y el fin del contrato de Punk se llegó a este encuentro que analizamos con tres miradas distintas.
Acá este análisis realizado en 2018:
Por Manuel Saavedra.
Después de ver a CM Punk humillado una segunda vez en UFC es bueno recordar tiempos mejores. En Money in the Bank 2011 vimos una de las luchas más importantes de su carrera en WWE ante John Cena, pero ahora viene la prueba difícil, ¿resiste en el tiempo la calidad del combate?
Antes de revisarla una vez más, mis primeras impresiones de la pelea fueron las de una historia perfecta y una de las luchas fundamentales de la era moderna de WWE. Pero al verla nuevamente creo que no es una lucha “de 5 estrellas” ni la mejor de ninguno de estos dos luchadores, aunque hay varios factores que sí la siguen haciendo tan importante como creía.
La storyline es lejos una de las mejores que se han visto en los últimos años, partiendo desde la promo que impactó al mundo del wrestling, cuando Punk despotricó contra todo y todos en su pipebomb. Y también tomando en cuenta detalles como el término de su contrato y lo que estaba en juego: si Punk ganaba se llevaría el campeonato más prestigioso de WWE a otro lado y su máxima estrella, John Cena, sería despedido.
El resultado final de la lucha es lo que hace que todo tome aún mayor importancia, pues el próximo programa era imperdible. La intriga de los fans era real.
Otro de los buenos detalles de la pelea es que enfrentaba a dos polos completamente opuestos: John Cena, el wrestler musculoso y con un físico que a Vince McMahon le encanta, que además representaba en ese momento al chico bueno, que se guía por las reglas al punto que llega a aburrir; era la cara de la compañía y todo lo que su oponente aborrecía (y envidiaba).
Por el otro lado, estaba CM Punk, irreverente, rebelde, con un físico más bien normal y alguien que, ya cansado de no ser tomado en cuenta, tomó el control y le dijo las cosas tal como eran a su jefe, incluso deseándole la muerte. ¿Cómo no identificarse?
Para añadirle la guinda a la torta, el evento era en Illinois, el estado de origen de CM Punk, donde en vez de ser considerado el villano fue venerado como un Dios. El babyface, en cambio, recibió una fuerte reacción negativa. Sin el público involucrado en cada momento, la lucha no sería igual de buena.
La lucha
El combate en sí parte lento (como una introducción de cuatro párrafos para hablar de una lucha), con idas y vueltas constantes sobre quien tiene el poder sobre el otro y unos primeros minutos que parecen innecesarios, pero no lo son. El ritmo empieza a volverse algo cansino cuando John Cena ataca y ataca, pero de repente se le nota la frustración y desesperación, por más que lo intenta no puede mantener a Punk abajo para el conteo de tres y retener el título.
Aquellos que en esos tiempos decían que Cena era solo cuatro movimientos debieron callar sus bocas, pues el de West Newbury, Massachusetts demostró en esta lucha una de sus mejores versiones: serio. Cena se alejó de la actitud de payaso que a veces toma y en su actuación se notó la importancia que daba al combate, que también lo llevó a innovar en ciertos movimientos.
Punk también parecía querer ganar más que nada en el mundo, y recibir el cariño del público lo revitalizaba como Gokú reuniendo energía para la Genkidama. Además de la ejecución de los movimientos, los luchadores deben cumplir en otros ámbitos como actuación, expresiones, interacción con el público, química y ambos lo lograron. Pese a algunos botches la lucha es buena (algunas luchas demasiado perfectas y bien coreografiadas llegan a parecer falsas, así que no le resta puntos). Quizás lo más atractivo en cuanto a movimientos son el rodillazo en la cara de Cena y las transiciones entre las llaves características de cada luchador. Los nearfalls también fueron muy bien logrados.
Pese a que al final ocurre una siempre indeseada interferencia (McMahon y Laurinatis), es consecuente con la historia y Cena termina perdiendo por ser el chico bueno que quiso poner su título y trabajo en la línea para hacer lo que creía correcto. Por intentar frenar la interferencia se distrae. Punk aprovecha la oportunidad y gana, desatando una fiesta en el público que después de eso realmente no sabía que podía pasar.
CM Punk vs. John Cena sigue siendo una lucha memorable, tanto in ring como por su storyline. No es la mejor de todos los tiempos ni un de técnica exquisita y variada, pero sí es fundamental en la WWE de la última década. Tuvo una historia y fórmula frescas como pocas veces se ha visto después. ¿Por qué es tan importante? Porque se atrevieron a hacer algo inesperado, se atrevieron a elegir al ganador correcto y a contar, a través de llaves, golpes y hombres volando por los aires, un relato sorprendentemente entretenido.
Valoración: 4 jumbitos.
Por Cristóbal Meléndez Martin
Combate que trasciende
Hay actos que al terminar no te dejan nada, logrando una sensación de nula trascendencia. No te invitan a pensar una y otra vez; menos a diagramar todas tus emociones. Pasan y no se quedan. Dejan un vacío.
Pues bien, acá pasa todo lo contrario. Pasó, siendo rigurosos, porque marcó un momento clave para WWE. Enfocándome principalmente en Chile, esta historia y posterior combate retomó el interés por una empresa que meses atrás se había presentado en un desolador recinto en Santiago, muy lejos de la expectativa de 2007 y 2008.
Esa falta de magia también se percibía en la pantalla, donde el producto estaba estancando y monótono. Llegó la pipebomb y todo parecía resurgir.
Cada uno tendrá su percepción sobre el combate, pero lo que este logró va más allá de unas estrellas o unos pequeños botches. Lo suyo quedó marcado probablemente para siempre.
Y como match, una vez visto para este especial, me ha vuelto a encantar al igual que la primera vez. No es perfecto, está lejos de serlo. Tampoco lo busca. Acá tenemos emoción, drama y euforia. El acto más apasionante de la década junto al ascenso de Bryan. Todo en medio de un público en éxtasis, con una mayoría dispuesta a desgarrar la voz para apoyar a su héroe y con otros buscando ser disidentes, desafiando lo establecido con sus poleras del enemigo y con cánticos de “vamos, John Cena”.
Dije que no era perfecto, porque me genera ruido que Punk haya sobrevivido a dos AA, en especial cuando venía de perder una rivalidad con Orton o perder un tag con Kane y Big Show. Era su lucha más importante, no se iba a dejar perder tan fácil. Pero no sé, en esa tan manoseada palabra credibilidad no me convence del todo.
Uno estaba bien, el desenlace hubiera sido más redondo para un enfrentamiento de alto calibre. Fuera de eso, tiene grandes detalles, unas secuencias difíciles de olvidar y una gran química entre los involucrados.
No me parece el mejor de su saga, pero sí el más trascendente. Y cuando lo logras, no hay nada más que agregar.
Valoración: 4 jumbitos 1/4.
Por Kingbilbin.
Como si fuera un partido de Libertadores
CM Punk vs John Cena tiene un sabor diferente. En raras ocasiones el wrestling se siente “diferente”. Lo sientes como si fuera un deporte en el que hay algo en juego.
Lo mágico de Punk vs Cena no fue tanto el genial choque, sino la refrescante propuesta de WWE; la cual se animó a utilizar la realidad y sus propios problemas internos en una historia.
John Cena y la STFU ante Punk
La historia del fin del contrato de una estrella extremadamente talentosa como Punk se usó a la perfección. Era el hombre adecuado por quien era, por potencial y por su pasado como icono independiente. Punk se convirtió en el héroe de un sector muy poco valorado por la empresa en el plano televisivo. Fue puesto como villano, pero realmente se convirtió en el antihéroe, una nueva manera de hacer las cosas.
Al llegar a ese Chicago abarrotado que le recibió como quien recibe a su equipo en una semifinal de Copa Libertadores sabíamos que esto era otra cosa. Por supuesto, Cena recibió ese tratamiento de enemigo visitante ante una auténtica hinchada radical que suspiraba por Punk.
La creación estelar se completó con Punk y Cena luchando mano a mano mientras Vince veía desmoronarse la imagen de su empresa. Tras una promo sangrante, ahora la lucha le daba un segundo golpe al ver a Punk irse como el héroe del pueblo, pese a sus intentos de evitarlo. Primero recurriendo a su icónico y ejemplar Cena e inmediatamente después con el desesperado canjeo fallido del heel Del Rio.
Se rompieron moldes y esto es lo que pesará. No lo harán las estrellitas que un periodista decidió darle a un enfrentamiento que ni siquiera fue el mejor entre ambos. Combate genial. Arco inolvidable.
